De estilo nórdico en esta vivienda de 55 m2 es de resaltar la pared de ladrillo pintado en blanco, la utilización del color en complementos y pequeños elementos y la originalidad de la cocina abierta al salón con una barra a modo de bar y el armario con pintura de pizarra.
Este es el mueble al que nos referíamos anteriormente y que contribuye a conectar la cocina con el salón o viceversa, junto con la barra.
El color mostaza como veis, se usa a pinceladas y aunque he de reconocer que no se encuentra entre mis preferidos, aporta mucha vida a los ambientes.
Lo que más llama la atención del dormitorio son las opciones de almacenamiento que tiene; a menor tamaño de la vivienda gana en importancia el orden, el que todo esté en su sitio… y los cajones de debajo de la cama son perfectos para ello.
¿Y que decir del baño? el alicatado me encanta así como la combinación de colores blanco, gris grafito y mostaza…El inodoro y el mueble-lavabo al estar suspendidos dan la sensación de mayor tamaño al baño.
Y qué mejor zona de trabajo que ésta tan luminosa y soleada, ideal para resistir los largos y fríos inviernos de Moscú. Es mi rincón preferido de la vivienda…
Pues ya veis cuanta creatividad y buenas ideas concentradas en tan poco espacio de las que tomar nota, tanto para un piso de soltero como para el hogar de una pareja.
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¡¡¡Feliz fin de semana!!!