Una cocina con una poderosa y predominante encimera de hormigón que se desliza hasta convertirse en una simple y sencilla mesa, una serie de detalles que hacen que este espacio transmita delicadeza y sutileza, un uso de la vegetación que evidentemente aumenta la confortabilidad de esta cocina haciendo apetecible los desayunos y almuerzos del día a día alrededor de ella y por último y no por ello menos importante una destacable grifería dorada. Es destacable lo poquito que hace falta para sentir cualquier interior.
vía: fantasticfrank