Un espacio adaptado a las características del terreno, que se mimetiza con el entorno y de posibilidades infinitas gracias a su funcionalidad distribución.
Un proyecto del estudio de arquitectura sostenible Batlló Concept. Un terreno entre árboles, una casa respetuosa con el entorno, con un presupuesto de 60.000 euros y tiempo de realización de no más de 6 meses.
El terreno, alargado y en pendiente, marca la forma rectangular de la planta de la casa, y la fachada se plantea en tono tierra oscuro, con el fin de que esta se mimetice con el paisaje.
Un espacio abierto a la naturaleza, donde los ventanales juegan un papel importante: aportan luz y unen la vivienda con el entorno. En el interior, de concepto abierto, cocina, salón y zona de trabajo comparten espacio, y tan solo un tabique separa el dormitorio, por el que se accede también al vestidor y al baño.
En la cocina predominan los tonos blancos, que se combinan con la calidez de la madera y el mobiliario, que se distribuye en "L" y la barra cierra el espacio.
Un tabique delimita la cocina del recibidor, aportando intimidad y a la vez funcionalidad, ya que se ha pintado con pintura de pizarra y se aprovecha con accesorios de almacenaje vertical.
Destacar que no solo se recibe la luz desde los ventanales, también desde los tabiques de pavés que se intercalan en la fachada.
Un espacio abierto que se decora con objetos de distintos estilos y diversa procedencia, con un rincón de trabajo con aire retro al fondo, pinceladas de color sobre una base neutra que hace que todo encaje.
Y un cuarto de baño el que destacan los contrastes en blanco y negro, práctico, al igual que el resto de la vivienda.
Un maravilloso entorno por dentro y por fuera, que invita a disfrutar y a descansar...
¿Y tú? ¿Te imaginas descansando en esta mini casa?
En el próximo post... El estudio más acogedor del mundo
¡No te lo pierdas!
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