Un telar, hilos o telas de distintos colores y tamaños, un poco de tiempo y mucha imaginación. Eso es lo que necesitamos para hacer nuestro propio tapiz. Y es que con poco y pasando un buen rato podemos decorar nuestra casa a la ultima. Esto de los tapices no es que sea algo nuevo como todos podéis imaginar sino que es una moda que ha vuelto renovada con diseños mas actuales y formas distintas. Si decidimos hacer unos con nuestras propias manos podemos o bien inspirarnos con los miles de ejemplos que podríamos encontrar en Internet, o bien dejar nuestra imaginación volar. A la hora de presentarlos podemos elegir entre enmarcarlos, utilizar ramas para darle un toque más natural, listones de madera, tubos de cobre, flechas....
A mi parece una forma muy bonita de decorar nuestras casas, además ya sabéis que todo lo hecho a mano ya me gusta de por si. Con un tapiz ayudamos a crear calidez en nuestro hogar, hacemos que parezca más acogedor, además de crear una decoración original y personalizada. Otra cosa buena que tienen los tapices que pueden encajar en casi cualquier estilo de decoración, ya sea estilo nórdico, bohemio, shabby chic o rustico, con lo que podríamos integrarlos perfectamente en nuestra decoración sin hacer muchos esfuerzos. Sin duda una buena opción para colocarlos en casa seria haciendo una composición con cuadros, láminas y otro tipo de objetos decorativos (como los corazones de madera que yo hago o las flechas).
Estoy seguro que esta tendencia os va a gustar y si os animáis a incorporarla a vuestra casa, solo tenéis que navegar un poco por la red para encontrar sencillos tutoriales que os ayuden a iniciar vuestros tapices. No lo dudéis y ¡A tejer!.
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Fuente: este post proviene de La Buhardilla Design, donde puedes consultar el contenido original.
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