En un tiempo en el que la escasez de metros es precisamente lo que protagoniza gran parte de nuestros hogares, la necesidad de aprovechar cada uno de sus rincones y espacios es casi un obligado para muchos. Pero claro, al mismo tiempo no queremos descuidar la parte más visual y decorativa a la hora de implantar cada nueva modificación en casa, así que conviene pensar muy mucho cómo y de qué manera vamos a poner en marcha cada iniciativa. Hoy te hablamos de aprovechar las paredes con baldas para que de forma abierta, puedas albergar todo aquello que quieras tener tan a la vista como a la mano. ¡Toma buena nota porque esta idea puede dar mucho de si!
Dando lugar a un aspecto visual bien parecido al que puedes conseguir incorporando un recibidor o incluso un aparador, aprovechar las paredes con baldas colocándolas tan sólo de media altura hasta el suelo, puede ser una estupenda idea para seguir conservando una estética más aireada a la altura de la vista. Sobre todo en el caso de estancias pequeñas donde velar por potenciar la sensación de amplitud espacial se convierte en indispensable.
Caso totalmente a la inversa es el propuesto a continuación. Y es que puede que al mobiliario que tengas, necesites añadir un suplemento más para ganar un almacenaje extra a la estancia en cuestión. Para ello, la zona superior de elementos de mobiliario tales como aparadores, cómodas, consolas, cajoneras o similares puede resultar ideal. Ya sea aprovechando la misma anchura que el elemento que tengas ya apoyado en esa pared para continuar generando sensación de conjunto, o aprovechando la longitud del total de la pared, lo cierto es que animarte a incorporar baldas hasta prácticamente el techo te supondrá un auténtico desahogo en el espacio.
Aprovechar al máximo el espacio de almacenaje puede ser una necesidad imperiosa para muchos. Aún así, piensa que siempre hay forma de encontrar un bonito equilibrio entre lo estético y lo funcional, así que ¡no te pierdas tan sólo en lo más práctico! Piensa que has de convivir con el resultado a diario, así que conseguir una bonita armonía al darle la bienvenida a casa será determinante para no terminar cansándote de la modificación más pronto que tarde.
Conseguir más amplitud en los espacios puede ser lo primero que persigas obtener al llevar a cabo el equipamiento o diseño interior sobre todo de algunos de ellos en particular. Y claro, el empleo de mobiliario suspendido será clave para conseguirlo. Entre las distintas piezas que te ayudarán a conseguirlo, las baldas. Distintos grosores, anchuras, colores y acabados te ayudarán a lucir el aspecto que mejor se adapte a tus necesidades. ¡Y con un presupuesto de risa!
¡Y tanto que sí! Y es que a menudo cuanto más fondo tenemos, más tendemos a acumular cosas que no utilizamos. Así que dejar de contar con una profundidad extra para almacenar nos obligará a dejar de hacerlo si verdaderamente queremos ser prácticos y funcionales al llevar a cabo esta iniciativa.
Aprovechar las paredes con baldas y dar lugar a una sintonía estupenda a través de ellas, es claramente posible. Piensa muy bien cómo poner en marcha la idea y como si de una composición mural se tratase, da forma al conjunto empleando para ello distintas longitudes de balda antes de ponerte a hacer agujeros en la pared. ¡Piensa en conjunto y tu decoración saldrá ganando! ;)
Parece que siempre hay paredes de las que nos olvidamos y que sin duda podrían aportar un plus de originalidad y buen gusto a la estancia en que se encuentran si nos decidimos de una vez a prestarles la atención que sin duda merecen. A menudo suelen ser pequeñas, así que las baldas para sujetar cuadros serán ideales para resolverlas.
Así, como suena y sin contemplaciones. Abarcar toda la longitud de una estancia puede dar lugar a resultados tan funcionales como impactantes a la vista a la hora de aprovechar paredes con baldas en casa. Y como para muestra un botón, mira qué resultados han conseguido en el ejemplo que por último te muestro. ¿No te parece ideal?
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