No todo son piscinas de poliéster en forma de riñón ni aparatosas estructuras que prometen un montaje ultrarápido que luego no es tal… Entre ambas opciones, existen este otro tipo de minispiscinas con encanto, pensadas para una inmersión relajante y sin veleidades de ninguna clase que prometen convertir nuestra casa en un paraíso terrenal, a nada que contemos con un pequeño espacio donde instalarlas. Son éstas, que hemos visto en el delicioso blog de Camille Styles.
Esta piscina en zinc parece un barreño de los de antes, y combina perfectamente con el estilo de la cabaña de madera, de auténtico Far West…
Esta piscina tipo alberca juega a crear un maravilloso oasis de frescor entre piedras cerca de un hermoso jardín de suculentas.
Poco más que una pequeña alberca es necesario para darse un refrescón en los días más calurosos del año. En realidad, la misma minipiscina de antes, vista desde otra perspectiva…
Esta habitación con piscina cubierta es un auténtico spa. Un verdadero lujo, que supongo de agua salada para no trasladar al ambiente el olor del cloro de la minipiscina…
Este sorprendente diseño escalonado aprovecha una pendiente para crear un auténtico Edén donde conviven el agua, las plantas, la piedra y la madera… Una minipiscina con encanto, digna de un marajá.
Basta un ancho mínimo de dos metros entre paredes para crear este ejemplar modelo de minipiscinas con ventana panorámica sobre el patio. ¡Casi se siente el frescor desde aquí…!
Si te ha gustado alguna piscina en especial, dinos cuál, abajo, en comentarios. Quizá te guste también leer este artículo de Decomanitas para decorar terrazas pequeñas con grandes ideas…
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