Como ya os adelanté, en la publicación de hoy os voy a hablar de como fue todo en el Terral Market, o 1º Festival de Diseño de Málaga, en el que estuve exponiendo todas las bellecitas que hago. Muchas veces desde fuera uno no es consciente de todo el trabajo y todas las sensaciones que se tienen cuando alguien acude a un evento como este y el propósito de esta publicación es contaros eso, todo lo que hay detrás (y delante) de una experiencia maravillosa como ha sido esta para mi.
Acudir a un evento como este o a algún otro mercadillo siempre supone mucho esfuerzo, supongo que no solo para mí sino para todos los que asisten. En mi caso me costó mucho decidirme a dar el paso para acudir al Terral Market. Para mi, que estoy empezando, el esfuerzo económico ya es importante pero todo no se centra en esto. Siempre se te viene a la mente dudas (o miedos) sobre si venderás lo suficiente, si acudirá bastante gente, si gustará tu trabajo, si podrás estar a la altura, si podrás llegar a terminar todo para llevar todos los productos posibles... y estas son dudas que difícilmente se pueden responder. Así que me arriesgué, y mucho, y al final decidí acudir.
Semanas antes de que comenzara el mercadillo ya estaba yo preparando cosas. Al tener la tienda online, había productos que si tenia en stock pero había otros que no y claro había que ponerse manos a la obra. Pero también había que compaginar esto con otros encargos y con el resto de la vida. Vamos muchísimo trabajo, con muchas horas de cortar, lijar y pintar por delante. A toda la presión por terminar el trabajo yo le tengo que sumar los nervios. Me pongo muy nervioso en estas cosas, sobre todo por las dudas que os comentaba antes, y los nervios siempre juegan en contra. Pero....
Foto de Jose Baez
Llegó el día y allí estaba yo, como mis bonitos adornos, mis muebles y mis nervios, listo para darlo todo. Coloque todas las cosas lo mejor que pude, me armé con mi mejor sonrisa y ya estaba listo para comenzar. Y el primer día fue genial. Por la mañana, para ser viernes, tuvimos muchísimas visitas y la cosa marchaba genial. Tanto que las ventas comenzaron bastante temprano y muchos de esas dudas que os comentaba antes desaparecieron. Pero la tarde no es que fuera peor, si no todo lo contrario. Todo marchaba genial y además por la tarde contábamos con música en directo con lo que le daba a todo un ambientillo fantástico. Fue un buenísimo primer día y de el me quedo con muchas cosas, pero principalmente dos, el ver que mis productos gustaban y sobre todo el conocer a los chicos de Coloretas, una pareja encantadora sin duda, que me animaron todo el fin de semana. ¡Muchas gracias a los dos!
El segundo día llegó y superó con creces al primero. Para empezar ya no tenia muchos nervios, bueno algunos todavía si jajaja, con lo que pude estar muchísimo mas cómodo. Y fijaros si comenzó bien que todavía no había terminado de colocar las cosas en mi puestecillo cuando ya hice la primera venta del día. Fue un día fantástico. Muchísima gente interesada, mis bellecillas se marchaban a muchos hogares y yo estaba súper feliz. ¡Si hasta me quedé sin tarjetas! jajaja. Incluso uno de los muebles que llevé se comenzó a preparar para irse a una bonita casa. El día fue sensacional, increíble, nos visitaron muchísimas personas y muchas de las cosas que había llevado se me agotaron. Fue brutal.
Ocurrieron muchas anécdotas graciosas pero sin duda la que mas me gustó y mas ilusión me hizo fue cuando dos chicas se me acercaron, me comentaron que me seguían por Instagram, y que habían visto un mueble fuera en la calle (concretamente un confesionario jajaja) que seguro que a mi me iba a interesar y con el que estaban seguras que iba a poder hacer algo genial. Muchas gracias a las dos porque que pensarais en mi y me lo comentaseis me hico muchísima ilusión. Este detalle fue genial.
Y el domingo llegó, y a pesar del cansancio de estar trabajando tantas horas, yo tenía una sonrisa de oreja a oreja. El día anterior fue sensacional y parecía que esta ya iba a ser mas tranquilo. Pues me equivoque porque de nuevo tuvimos muchísima gente. Incluso gente que repetía y me preguntaba por algunos de los productos, como las anclas, los cactus y los espetos, y yo tenía que comentarles que se me habían acabado. Llegó el final y con el la hora de entregarme al sofá de mi casa, cosa que no estaba tampoco mal jajaja.
Menos mal que me arriesgué porque me habría perdido muchas cosas, no solo el vender que es importante, si no un montón de sensaciones, un buen montón de alegrías. Así que por hacerme pasar una experiencia tan buena y bonita quería daros de nuevo las gracias (ya os las di el lunes pero no es malo repetirse para este tipo de cosas), primero a todo el equipo del Terral Market por su trabajo y por estar tan atentos a todo ¡Sois un gran equipo! Después a todos los que fuisteis a conocer el trabajo de todos los que estábamos allí, gracias también a todos los que os llevasteis a casa alguna de mis cosillas y por confiar en mi, gracias también a todos los que os gustó mi trabajo y os interesasteis por el, gracias todos los que me dejaron sin tarjetitas para mas adelante conocerme un poco mas, gracias a todos los que llegabais y decíais "si yo te sigo por las redes sociales" porque nos os imagináis la ilusión que me hace que sigáis día a día mi trabajo, gracias a todos mis compis de mercadillo porque vuestro trabajo es brutal y digno de admirar (además de ser gente genial).... ¡Gracias a todos!
Desde luego el dicho tiene toda la razón, quien no arriesga no gana, y yo este fin de semana he ganado un buen montón de cosas, entre ellas muchas alegrías. Sin duda en la próxima edición del Terral Market voy a estar el primero jajaja. ¡Ha sido una magnifica experiencia!
Fuente: este post proviene de La Buhardilla Design, donde puedes consultar el contenido original.
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