Como no podía ser de otra forma, acabó entrando en los hogares de la clase media en la década de los años 30, y conviertiendose en indispensable para nuestro modo de vida actual. Un utensilio doméstico de uso habitual y frecuente, para mantener caliente el café por la mañana, para llevar las papillas, o para transportar cualquier tipo de de bebida o liquido que queramos mantener a una temperatura determinada.
En casa tengo dos termos, uno con vasito que utilizo para transportar bebidas calientes, o tener preparada agua templada con limón por la mañana, y otro con regulador de salida que utilizamos para mantener caliente el café. En verano a los niños les dejo siempre preparados dos termos metalicos con agua fría para cuando tienen sed por la noche. Como es algo que manejamos bastante los tengo a mano en un armario bajo de la cocina. Siempre aconsejo tener al menos un termo en casa, y si no se usa con frecuencia se puede guardar en el fondo de algún armario, de forma que se vea aunque no esté accesible.
Os dejo mi tablero de Pinterest dedicado a los termos donde podréis ver 70 imágenes con una gran variedad de estos objetos, de diferentes épocas, diseños y tamaños.
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