(Este y otros libros que me gustan, si quieres los puedes adquirir a través de mi enlace afiliado de Amazon)
Según cuentan en su libro, querían que los espacios fueran a la vez funcionales y bonitos, así que dieron con un sistema único que da un toque estético a la par que práctico. Un enfoque muy parecido a como un diseñador aborda un espacio.
Ahorras tiempo: ya que va a ser más rápido de encontrar y más fácil de ordenar.
Ahorras dinero: poder ver las cosas significa que no comprarás de más por no haberlos encontrado o por no saber que ya los tenías. Además te obliga a no comprar más hasta que tengas espacio para ello.
No pierdes el juicio: todos sabrán donde está cada cosa, podrán cogerla ellos mismos y sabrán cómo guardarla.
Ayuda a pasar página: nadie quiere enfrentarse a los sentimientos que genera deshacerse de cosas, pero dando ese paso y despejando el espacio (física y emocionalmente) te sentirás más aliviado y satisfecho.
Te relaja: cuando está todo ordenado y cada cosa en su lugar.
El método, básicamente se organiza en los siguientes pasos:
Revisar
Sácalo todo: es mucho más complicado conseguir un sistema eficiente y estético si tienes que encontrar sitio a cosas que ni siquiera te importan. Evaluar cada objeto por separado es la mejor forma de saber que necesitas/usas/quieres y así deshacerte del resto. Vacía las estanterías y cajones del todo y no olvides pasarles un trapito.
Clasifica las cosas en grupos: pero no te pongas a organizar todavía.
Reduce al mínimo: tienes que decidir que cosas merecen tu atención, tiempo y esfuerzo a la hora de crear y mantener un espacio de estilo zen bonito y despejado que te haga feliz cada día. Es muy importante que vayas metiendo las cosas en bolsas (donar, regalar o tirar) a medida que haces la limpieza. También puedes hacer un montoncito pequeño con las cosas que necesiten arreglo, reparándolo lo antes posible y devolviéndolo a su sitio.
Reglas para saber de qué cosas deshacerte:
¿Lo necesito?
¿Lo utilizo?
¿Quiero usarlo?
¿Me gusta?
¿Tiene valor sentimental?
Artículos de almacenamiento
Mide el espacio
Aumenta el espacio útil (aprovechando toda la altura del estante)
Valora la opción del espacio negativo (suelo, interior de las puertas, etc.)
Recorre toda la tienda (puede que encuentres algo perfecto para la cocina en la sección de baño)
Compra recipientes de varios tamaños (así seguro que te encajarán)
Compra al por mayor (y ya devolverás el excedente)
Analiza tu estilo de vida
Comprar recipientes del mismo diseño y/o color (los productos que combinan embellecen un espacio al instante)
Ordenar
Etiquetar
La regla de oro es decantarse por las categorías generales (desayuno, aperitivos, dulces… cara, cuerpo, farmacia… camisetas, gorros, bolsos…) y dejar de manera secundaria las categorías más detalladas (azúcar, pasta, champú, natación, rompecabezas, detergente, etc)
Comienza por un cajón. Vaciar un cajón entero es mucho menos abrumador que vaciar un armario. Verás la luz al final de túnel mucho más rápido y clasificar el contenido será mucho mas sencillo y sosegado.
La magia de ordenar la ropa
La magia de ordenar libros, papeles y objetos varios
La felicidad después del orden (LFDDO)
LFDDO – La ropa
LFDDO – Complementos y komono
LFDDO – El baño
LFDDO – La cocina
(Aquí tienes mi lista de orden y limpieza de Amazon)
Espero que te haya gustado el post y que te pongas manos a la obra cuanto antes para poder tener una casa de revista