Después del fin de semana, y con la bajada de temperatura que nos ha dado el domingo, al fin parece que disponemos de un respiro en el que tomar nota e inspirarnos nuevamente sin ningún tipo de agobio. Calma y color a partes iguales, frescura y luz que se cuela por cada estancia y así un sin fin de combinaciones que hacen de este lunes un día mas agradable.
Para celebrarlo entonces es cuando hoy nos colamos en esta equilibrada casa llena de una decoración en la que las piezas con una clara linea moderna y minimalista se han colado en cada rincón y espacio para darle ese guiño de delicadeza.
Un espacio pulcro, muy delimitado y definido en el que cada detalle por pequeño que sea, posee una personalidad y un toque de color que irradia frescura.
Equilibrar una decoración llena de calma y color pasa en su mayoría por destilar como colocar color, haciendo que entre si, se rompan los esquemas cromáticos, y restando pesadez visual con estampados o piezas que rompan el impacto visual.
Que sorprende por la vida que transmite sin ser un espacio poco ordenado, y en el que sin duda, el gusto por el diseño se cuela hasta la terraza cerrada con la que deleitarse en un descanso.
Sin duda… calma, color y delicadeza, ¿no creéis?
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