En todo caso, generalmente son medidas impuestas por las empresas que hay que cumplir y que, por tanto, debemos abordar con positividad y valorando todas las ventajas que ofrecen.
Hoy, por nuestra parte, queremos ofrecer unos consejos básicos para que el teletrabajo sea lo más eficiente posible: cómo debe ser la iluminación, qué debemos tener en cuenta para cuidar de los equipos informáticos, cómo organizar el espacio de trabajo en casa, cuál es la postura más adecuada para pasar largas jornadas frente al PC... ¡Te lo contamos todo en este post!
El espacio de trabajo
Tenemos que tratar de montar una oficina en casa, un espacio que, si es posible, se destine solo a eso y, una vez haya terminado nuestra jornada, podamos dejarlo. Esto, psicológicamente hablando, nos servirá de ayuda para diferenciar hogar de oficina.
Antes de nada, y siempre dentro de las posibilidades de cada uno, trata de buscar el lugar de la casa más adecuado: alejado de ruidos, luminoso, que no sea de paso... Una vez lo hayas decidido, puedes recurrir a unas recomendaciones muy sencillas para hacer de él un lugar cálido y acogedor:
- La mesa. Elige una mesa amplia, que te permita tener a tu alcance todo lo que necesitas para desempeñar tu trabajo. Trata de tenerla siempre bien ordenada, al igual que tu agenda y tu propia mente.
- La silla. Es el elemento más importante, ya que una silla ergonómica y de calidad disminuirá los efectos, a nivel físico, de trabajar durante horas frente a una pantalla.
- Decoración. Se recomienda que sea sencilla y no recargada, con los muebles estrictamente necesarios para trabajar.
- Plantas. Las plantas te dan vida y alegría. Elige tu favorita y sitúala cerca de ti.
- Temperatura. No te pases con la calefacción ni con el aire acondicionado. Mantén una temperatura ambiente suave y constante durante todo el año, ni fría ni cálida.
- Iluminación. Nuestra vista puede sufrir mucho a la larga si no prestamos atención correctamente a la iluminación de la estancia. Para teletrabajar se aconseja emplear una lámpara de sobremesa o de pie que permita regular la temperatura y emitir una luz blanca y fría. De esta forma estaremos más activos y concentrados en el trabajo. Y, por supuesto, la luz del sol será siempre la mejor aliada.
Cómo cuidar los equipos informáticos
Para teletrabajar eficazmente es importante estar pendientes de nuestros equipos informáticos, tanto del hardware como del software, ya que será nuestra herramienta de trabajo y no tendremos cerca a una persona de soporte técnico para solventarnos cualquier incidencia en el momento
Tener los equipos actualizados. Hay que tratar de tener siempre instalada la última versión del sistema operativo, navegador y programas, ya que estas serán más seguras y óptimas que las anteriores.
Eliminar lo superfluo. No debemos ocupar la memoria del ordenador con archivos inútiles o programas que no utilizamos. Esto no hace más que ralentizar el sistema.
Hacer copias de seguridad. Guarda la información más sensible en discos duros externos o en internos secundarios. Que un fallo en el sistema, en el disco o una subida de tensión no eche por tierra todo aquello que es importante para ti. Otra alternativa muy buena es almacenar datos en la nube (Google Drive o Dropbox, por ejemplo).
Limpiar físicamente el ordenador. El polvo y las telas de araña pueden producir un sobrecalentamiento en tu PC y terminar produciendo una avería. Para limpiarlo por dentro puedes ayudarte de un bote de aire a presión.
Cómo sentarnos frente al ordenador
Largas jornadas sentados en una silla terminan pasándonos factura, sobre todo a la espalda y región cervical. Para evitar esto es necesario que la postura no sea forzada, manteniendo los ángulos rectos entre la espalda, el muslo y la pierna, así como entre brazo y antebrazo. En cuanto a la posición de la pantalla, debe de ser elevada (a la altura de los ojos o algo menos) y a una distancia de nosotros de unos 50 cm.
La postura adecuada es la que observamos en la siguiente imagen.
Realizar ejercicio físico
Teletrabajo y sedentarismo no tienen por qué ir unidos siempre. De hecho, no debe ser así. Se recomienda que dediquemos unos minutos a hacer ejercicios para que la espalda, y en general todas las articulaciones, no se vean resentidas. Así, aparte de hacer el deporte recomendado para cada día, según nuestra edad y condición física, también podemos recurrir a estos ejercicios tan sencillos:
Abdominales hipopresivos. Sirven para fortalecer el abdomen, desde el suelo pélvico hasta las costillas. Es tan sencillo como hacer respiraciones profundas, vaciar el aire, meter el abdomen y tirar hacia arriba de la musculatura del tronco, manteniendo 10 segundos la respiración.
Levantamiento de pantorrillas. Para hacer ejercicio con las piernas. Levantamos los pies, sin despegar las puntas del suelo y tensar los gemelos, y mantenemos durante unos segundos. Relajamos y repetimos en 10 ocasiones.
Elevación de piernas. Elevamos las piernas de forma alterna hacia delante, manteniéndolas contraídas al llegar al punto más alto.
Glúteos. Contráelos por intervalos mientras se mantiene la espalda recta, así los endurecerás y mantendrás en activo sin levantarte.
Presiones de brazos. Para trabajar los tríceps, podemos hacer lo siguiente: descansamos los brazos en la mesa o escritorio, de manera que formen un ángulo de 90 grados con respecto al cuerpo. En esta posición, se ejerce presión sobre los brazos y se mantiene la postura durante 30 segundos. A continuación, se colocan las extremidades debajo del escritorio con las palmas hacia arriba y se presiona 30 segundos.
Practica esto a diario y durante unos minutos... ya verás qué bien te sienta.
Seguir una rutina es importantísimo
Está comprobado que el teletrabajo alarga las jornadas laborales. ¡Hay que evitar esto! Trata de distraerte lo menos posible, organiza tu día y dedica el tiempo necesario a cada tarea. Cuando hayas terminado, apaga el PC y no lo enciendas hasta el día siguiente.
Los expertos aconsejan que sigamos un plan rutinario, igual que si fuésemos a salir de casa para trabajar. Es decir, levantarnos temprano y siempre a la misma hora, desayunar, ducharnos... ¡no es nada recomendable trabajar en pijama!
Ah, y mucho cuidado con la alimentación y las visitas frecuentes a la nevera, es mejor organizar convenientemente las comidas -saludables- y ceñirse a esta planificación.
Como siempre, recuerda ver el lado positivo del teletrabajo... ¡tiene muchas ventajas!
¡No te pierdas nuestro próximo post de Vivienda Saludable! ¡Te esperamos con más consejos!