Cada vez hay más muebles y sistema de anclaje pensados para guardar la bici de una forma cómoda y decorativa, sin arruinar la decoración de la estancia.
Hoy te propongo la siguiente solución ideal para colocar en espacio reducidos:
Elige una pared, cercana a la entrada de casa, con superficie suficiente para colgar la bicicleta. La I.D.E.A es disponer en ella un soporte de madera con abertura. El soporte, además de sujetar la bicicleta, funciona al mismo tiempo como un pequeño estante. Puedes apoyar en él aquellas cosas que habitualmente llevas a la calle (llaves, gafas, guantes, móvil..) o cualquier objeto decorativo.
Diseña tu propio soporte (o adquiere uno) pero, asegúrate que quede bien sujeto y sea capaz de resistir el peso de la bicicleta sin problema.
Fotografías: decoratrix