Las sillas de jardín, las mesas de exterior, una hamaca o macetas hechas con elementos reciclados no pueden faltar en las noches de verano en el jardín
Hoy en día podemos encontrar todo tipo de mobiliario de jardín a buen precio por Internet
Los meses de verano son para muchas personas sinónimo de pasar horas y horas en el jardín. Aunque tengamos la playa, el campo o el río cerca, en ocasiones lo que más apetece es poder descansar en nuestra propia casa a la sombra del porche o de un árbol. Para eso lo mejor es contar con un buen mobiliario de jardín que nos permita poder comer o estar sentados/as en el exterior. Hoy en día podemos encontrar en Internet un gran número de modelos y tipos de sillas de jardín, de sofás exteriores y de mesas. Además también existe la posibilidad de comprar directamente un juego completo que incluya todo lo necesario para montar un comedor fuera.
Así, lo más importante a la hora de empezar a preparar el jardín es pensar para qué vamos a utilizarlo. Si no vamos a hacer comidas quizá no necesitamos comprar una mesa, o si queremos leer tranquilamente después de comer, quizás sea mejor un sofá que un par de sillas. Una vez tengamos eso claro podemos iniciar la búsqueda de modelos, teniendo en cuenta que deben estar preparados para el exterior; es decir, que sean impermeables y resistan la humedad y los cambios de temperatura.
Los tonos blancos o de madera son algunos de los que mejor quedan en el exterior, ya que combinan a la perfección con el verde de las plantas. También podemos encontrar sillas de jardín con motivos de animales perfectas para los/as más pequeños/as de la casa. Otra buena idea si disponemos de poco espacio son las sillas plegables, ya que podremos recogerlas cuando no las estemos usando y disfrutar del jardín para otras actividades.
Otro elemento que no puede faltar son las macetas decorativas. Aunque ya contemos con plantas y árboles, podemos contar también con flores o plantas trepadores que den un aire alegre al jardín. Podemos reciclar diferentes elementos, como palés, cubos o regaderas para fabricar nuestras propias macetas y dar una segunda vida a esos objetos.
Por otra parte, las noches de verano en el jardín de casa serán mucho más especiales si contamos con pequeñas luces a modo de guirnalda o lámparas exteriores. Estas darán una luz tenue al ambiente perfecta para pasar horas charlando, cenando o leyendo en nuestra finca. Hoy en día es fácil encontrarlas en tiendas físicas o por Internet.
También podemos montar un chill out en este espacio, utilizando para ello cojines, muebles de mimbre y una buena hamaca para tumbarnos. Si añadimos farolillos colgados o velas el jardín cobrará un aspecto realmente mágico. Además, este espacio puede aprovecharse también en invierno si añadimos una alfombra de exterior y un par de mantas para no tener frío. Incluso podemos reciclar un tambor de lavadora viejo (bien limpio y con patas añadidas) para hacer pequeñas fogatas en su interior.