Comencemos diciendo que toda cocina debe ser esencialmente, práctica y funcional. Deben poseer un no sé qué que qué sé yo…Eso que te hace verla y desearla!
Es decir, lo que viene a ser cierto encanto que la hace única e irrepetible. Los estilos y gustos decorativos los hay a cientos, según necesidades del usuario. Aunque si me preguntan a mi, una cocina de 10 es aquella que es ámplia y cómoda. No tiene por que ser demasiado espaciosa pero sí estar diseñada con cabeza y buena mano. Cada cosa en su lugar y dejando el resto libre!
Generalmente, soy muy, pero que muy, partidaria de las piezas recuperadas. Adoro la mezcla de lo antiguo en sus diferentes gamas y épocas, la perfecta sintonía de lo clásico y moderno. Buscar un ambiente entre ecléctico-vintage-retro, por definirlo de algún modo.
A pesar de lo dicho, en la cocina, aún incorporando piezas con historia, especialmente como parte de su decoración o en cuanto al menaje se trata. En el resto de muebles, tiendo mas a las lineas rectas, limpias y sufridas.
No soporto aquellas cocinas llenas de trastos y con las encimeras de mil colores, donde la suciedad llega a camuflarse. Mil veces mejor una madera o piedra lisa y bien tratada, como también la maravillosa posibilidad de una encimera de material.
DETALLES CON ALMA EN TU COCINA,
Pero nunca debemos olvidarnos de aquellos pequeños, pero importantísimos toques peculiares. Elementos y accesorios muy personales, que aportan un valor añadido y un carácter a toda la estancia capaces de llegar a levantar o arruinar todo el espacio. Pequeños complementos que dan luz y cargan un ambiente del mejor de los modos.
Combinaciones ganadoras entre azulejos de colores vibrantes y luminosos, la calidez y calidad de la madera, sin olvidarnos de mencionar la fuerza y presencia del metal. Siempre, buscando el porcentaje adecuado para un equilibrio perfecto entre estructuras, materiales , accesorios y complementos decorativos al uso.
Bueno ejemplos de todo lo que a través de estas lineas pretendo explicar, son las siguientes imágenes.
Si tenéis la gran fortuna y el enorme privilegio de disfrutar de alguna de estas cocinas, aunque solo sea de una pequeña parte de sus rincones, mi mas sincera enhorabuena!!!
El resto de mortales, nos conformaremos con pequeños destellos de inspiración. A pesar de lo cual, hacen de nuestras cocinas lugares mágicos y personales. Un microcosmos, absolutamente nuestro, en el momento que nos encontramos entre sus cuatro paredes.
Ahora, os toca disfrutarlas y manchar de harina y azúcar sus encimeras, inundando de rico aroma a dulces caseros, capaces de de endulzar y mejorar nuestras vida de un modo casi catársico…
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