Antes de elegir los muebles y los complementos, tenemos que decantarnos por los colores de las paredes. Algunas premisas como el tamaño de la estancia, la luminosidad o la altura de los techos serán determinantes para decidirnos. Desde Valentine afirman que debe ser determinante la luz de la vivienda, su orientación para saber qué clase de luz recibe y a que horas y, por último, nuestros gustos.
La misma firma comenta que "este año por un lado están los colores estridentes y llamativos que despiertan los sentidos y, por otro lado, colores más suaves que invitan al descanso". Bruguer nos aconseja que a la hora de elegir el color "tengamos presente que estamos creando un ambiente". Aquí os damos algunas claves sobre las nuevas tendencias.
La casa de pinturas Titanlux nos sorprenden con tres ambientes llenos de contraste con colores llamativos, intensos y llenos de vida. Si nos arriesgamos con estos contrastes podemos seguir la regla de oro que nos da Valentine: 60% de color predominante, 30% de color secundario y 10% en los detalles.
Si nos gustan las estancias bucólicas, confortables, acogedoras... La gama de los tonos pasteles es todo un acierto. Este tipo de colores suaves refleja la luz y llena de romanticismo toda la casa. Dentro de esta tendencia encontramos la combinación de violeta y verde que está teniendo mucho éxito.
Marta Sañe, jefa de producto de Bruguer, declara que "actualmente se decora pintando". El uso de tonos muy fuertes hace que los muebles pasen a un segundo o tercer plano, puesto que ya no juegan un papel primordial en la decoración del salón o el dormitorio. En cierto modo, está teoría explicaría la explosión del mobiliario en blanco.
Las últimas tendencias se han ido sofisticando en lo referente a texturas y acabados, de este modo han surgido las pinturas con acabados metalizados que nos ayudan a potenciar la luz en la habitación. Estos tonos dan un aspecto de exclusividad y lujo a toda la decoración de la casa y son perfectos para destacar una pared o algún elemento arquitectónico.
Por último, las gamas de blanco han sabido adaptarse a los tiempos modernos e ir desde los ambientes más clásicos hasta espacios más minimalistas y diáfanos. Para crear una estancia más acogedora lo mejor es optar por ocres o tonos crudos que aporten calidez a la luz.
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Para más información: Tintanlux, Bruguer y Valentine