Cuando la lámpara Vértigo de Constance Guisset preside un salón y a su alrededor encontramos piezas mid-century, iconos del diseño y todo está enmarcado por una paleta de colores naturales junto al elegante negro, la casa sólo puede ir a mejor.
La vivienda está situada en Hollywood y fue construida en los años 30. Sus anteriores propietarios fueron los míticos actores Angela Lansbury y Vincent Price, ahora pertenece a una joven pareja. Él, Jared Morgenstern, es unos de los diseñadores más importantes de Facebook y ella, Emily Luntz, de la factoría Disney. El estilo de la casa es tradicional así que ellos decidieron crear un espacio luminoso y mezclar tradición y diseño.
No fue necesario una renovación completa ya que había sufrido varias a lo largo del tiempo, así que con la ayuda de JDP Interiors, se centraron en mejorar las características de la casa para crear ese ambiente atemporal y joven que los propietarios estaban buscando.
El aseo se decoró para sorprender. El papel pintado se llama Crescent y es de Kelly Wearstler, se completó el espacio con un fregadero de piedra sobre encimera, unos apliques de corte mid-century de la firma Cedar & Mos y un precioso espejo de metal redondo de West Elm. La chimenea de la sala de estar, era rancia y aburrida, con piedra gris que la cubría, se sustituyó por pizarra negra que le da un aspecto más moderno.
Para la decoración se decidió utilizar una paleta de color natural, se buscaba que el resultado fuera atemporal, neutro y simple, pero sin que resultara frío. Para lograr el equilibrio entre algo tan neutral pero con resultado acogedor, se recurrió a las texturas y a la incorporación de piezas vintage. Una vez más la mezcla de lo viejo y lo nuevo. En la sala de estar por ejemplo, la antigua mesa de centro de corte oriental, se acompaña de unas banquetas de madera y caña (segunda imagen) que aportan textura en forma de fibra natural, los cojines también antiguos, marcan la diferencia.
Cuenta Joyce Pickens que una manera de aportar modernidad sin luchar contra la arquitectura tradicional, es mediante la iluminación. Dice que ni siquiera fue una elección consciente, que se guió por sentimientos (parece que es de los míos). Añade que buscaba el proyecto perfecto para incluir este tipo de lámparas, que prefería elegir un mobiliario atemporal y clásico y divertirse sobre todo con las luminarias y las sillas. En el comedor lámpara Seven Globe de France and Son y sillas Woven Leather de Wisteria.
Para el interiorista además de la sala de estar y el comedor, su habitación favorita es el dormitorio principal. Se creó un espacio sofisticado, la cama negra con dosel se está convirtiendo en uno de sus sellos de identidad, la utiliza en muchos de sus proyectos ya que siente que es una pieza que produce un gran impacto. Para restarle importancia al espacio y poner la nota joven, añadió un columpio.
Una apreciación mía. Me resultan curiosas las costumbres, aquí en España no solemos colocar la cama entre dos ventanas y sin embargo en América es algo muy habitual. Antes no me convencía mucho pero me voy acostumbrando a la idea de tanto verlas así y si lo pienso fríamente, tiene sus pros. Te puedes ahorrar el cabecero ya que las mismas ventanas enmarcan la cama y por otro lado, si eres de los que le gusta leer tumbado, tienes la fuente de luz directa.
Para terminar deciros que la casa me ha encantado (ya sabéis, el blanco, la luz, la mezcla de piezas, todo aquello por lo que siembre abogo), pero que me he quedado con muchas ganas de ver la cocina ¿será que no es tan espectacular como el resto? quién sabe…
¡Feliz fin de semana!
Info: JDP Interiors y Domino. Fotografía: Amy Bartlam