Cada año para evitar hacer los más de mil kilómetros que separan el pueblo de Soria donde veraneamos de la zona donde pasamos una semana en Portugal, intentamos hacer noche en algún sitio chulo. El año pasado fue Trujillo, el anterior en Portimäo, hace dos en Évora,… así la distancia es más llevadera.
Este verano habíamos pensado pasar un par de días en Lisboa (ya sabéis las ganas que tengo de ir), pero me da que en pleno agosto no es el mejor momento. No disfruto de las ciudades si hace mucho calor, en época estival prefiero otro tipo de turismo.
He encontrado esta maravilla de casa en Comporta, en pleno Alentejo portugués. Está a unos ciento veinte kilómetros al sur de Lisboa y a ciento cuarenta de nuestro destino final. Parece buen sitio para pasar una noche, o dos, o tres,… o ya que estamos, que no me saquen de allí :-) Lo cierto es que me sobraría casa por todas partes (está acondicionada para siete personas), pero soñar es gratis y su diseño ha llamado mucho mi atención.
Soy pesada con el tema, pero esta casa me demuestra una vez más, que no se necesita demasiado para brillar. Y aquí el brillo cobra doble sentido, gracias al blanco inmaculado de todos sus espacios solamente interrumpido por elementos de madera.
Me ha hecho gracia descubrir el altillo. En Portugal son típicas las casas en planta con tejados a dos aguas, por lo que el espacio bajo cubierta se utiliza como zona habitable, normalmente es un dormitorio más. La casa donde iremos este año también lo tiene, ya hemos estado en ella más veces y es ahí donde dormimos mi marido y yo. Es como un nidito de amor, recogido y entrañable, pero no veáis las que lío cada noche cuando me dan ganas de ir al baño. Bajo por esas empinadas escaleras en chanclas (algún día no lo contaré), intentando hacer el menor ruido posible, colocando al salir la mosquitera para que no nos coman los mosquitos, y con el frontal de correr plantado en la frente para darme luz. Vamos que soy todo un show y la magia del altillo se pierde en un momento. Aún así adoro estas casitas sencillas y fieles a su esencia lusa.
Dejo el enlace de esta vivienda pero podéis cotillear los muchos destinos de vacaciones que ofrecen en Boutique Homes. Os aviso, os costará elegir…
¡¡Feliz fin de semana!!
Imagen portada vía
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