Una buena forma de comenzar a embellecer nuestra casa es por las paredes. Si tus paredes son blancas, estas de suerte, dado que unos cuantos tapetes de color rojo, o unas cortinas o unas cuantas guirnaldas o bolas de cristal carmesí quedan de maravilla.
También nuestro árbol puede ser decorado en blanco y rojo, incluso puede ser bicolor y quedar espectacular. Las bolas de cristal en estos dos colores son magníficas y al combinarlas con el verde del abeto quedan ¡fenomenal!
Pero si algo queda impresionante decorado en estas dos tonalidades es la mesa. Da igual cómo los combinemos, mantel rojo y platos blancos, mantel inmaculado y vajilla del color de la pasión, todo blanco y unos bonitos centros de mesa escarlatas… No importa cómo lo combinemos dado que son dos colores que se adaptan a la perfección con todo. ¿Os animáis a decorar en rojo?