Ahora que los motivos decorativos con un toque árabe son tendencia,
que las baldosas hidráulicas se han convertido en must, recuerdo lo
admirada que quedé por las texturas y los colores de las porcelanas
en un viaje a Marrakech hace ya tiempo.
De allí me traje unos cuencos y una fotografía con toma cenital
sobre un maravilloso suelo de baldosas árabes.
Y todo esto para deciros que para el Finde de Inspiración de
Colorín Colorado muestro cómo hice un mosaico de
baldosas marroquíes.
Encontré unos catálogos bibliográficos de filología árabe que iban
a ser tirados por duplicados y cuya cubierta me encantó
por diseño y por color.
Doce revistas en total, diez de un un volumen con colores rosas y
naranjas y dos de otro en tonos azulados y verdes.
Enseguida visioné unas baldosas y pensé cómo podría hacerlas.
Recordé unos cuadrados de dm que me habían sobrado de las baldas
de la estantería BENNO de Ikea
Corté al mismo tamaño el cuadrado mayor posible de cada una de las
cubiertas de las revistas.
Por el lado impreso coloqué una de las maderas sobre el dibujo y
marqué exactamente los vértices para luego doblarlos.
Sesgué los vértices con un cutter.
Y corté cada triángulo resultante siguiendo la línea de doblez.
Con el primer cuadrado de cartulina hecho, fui trasladando
a los demás cuadrados las lineas de corte cuidando de que
el dibujo coincidiera perfectamente.
Luego el proceso es fácil:
doblar, pegar, dejar secar y montar.
Añadí cinta adhesiva de doble cara a cada "azulejo" y formé
la composición en la pared, dejando un centímetro entre las
piezas y poniendo los dos azules en el centro.
¡Y aquí tenéis el resultado!
Adoro las formas geométricas.
¿Y vosotros?