Las medidas de nuestro dormitorio no llegan a 8 metros cuadrados, para que os podáis hacer una idea. Aún así, tiene mucho encanto por tener los techos altos e inclinados. Decidimos buscar pocos elementos, que no recargaran mucho la estancia y que ayudaran a conseguir el máximo de espacio posible.
Es por ello que decidimos poner una cómoda doble de Ikea (que por desgracia está descatalogada) en vez de un armario. Esto a la vez también nos forzó a ser minimalistas en cuanto a la ropa cuando pasamos temporadas aquí.
Le di un toque a la cómoda y en vez de poner los pomos de madera con los que venía, los cambié por unos redondos en dorado que compré en Leroy Merlín. En cuanto a la cómoda, tenéis esta opción en Ikea que es lo más parecido que he encontrado.
Encima de la cómoda pusimos un espejo redondo (para romper con las líneas rectas de la habitación) con el margen también en dorado de hannun bcn. Lo podéis ver aquí.
A modo de mesillas pusimos dos lámparas de ratán que compramos en westwing. Tenéis de parecidas aquí.
También tenemos una mesilla de crochet, con patas de madera (que no medí demasiado) y que se pasa de medidas para este dormitorio, pero que me gusta tanto que soy incapaz de deshacerme de ella
¡Y se terminó la habitación! ¿Qué os ha parecido? Espero que os dé muchas ideas para decorar vuestras estancias. ¡Mil gracias por estar al otro lado!