vía: HGTV
Lo que me encanta de los domingos es el relax que se respira en casa. No hay prisa para levantarse ni para salir. Y precisamente hoy que casi tod@s nosotr@s remoloneamos un poco más en la cama, vengo a compartir con vosotr@s una habitación de niños. Pues bien, hoy traigo este espacio para los amantes de las texturas, patrones y sobre todo el color. Un dormitorio NO APTO para los amantes del "Total White".
Cuando lo vi me llamó la atención la combinación de colores, rojo, blanco y negro que junto a las literas hacen de esta habitación el lugar perfecto para los más pequeños. Adoro sus techos abovedados, las vigas de madera y los enormes ventanales que inundan de luz el espacio.
--Textiles: la misma paleta de colores con diferentes patrones. La combinación y los diseños llamativos consiguen convertirla en una habitación perfecta para niños grandes. No solo para bebés.
-Paredes blancas: la base blanca permite jugar con lo colores y además añadir el blanco en los tejidos. Aporta frescura y luz a la habitación.
-Mobiliario en negro: por la fuerza del color atrae la atención pero los textiles, la gran cantidad de luz y el gran espacio suavizan el impacto visual. Aporta personalidad (¿masculina?) a la habitación.
Después de todo esto os aseguro que esta habitación guarda algún secreto más y lo podéis ver pinchando aquí.
¡Feliz domingo a tod@s!