Un muro cerámico con un mural pintado en una composición de negro, blanco y rojo, ofrecen el acceso a este singular edificio. Entrar en la casa significa alternar en una sucesión de espacios, ahora estrecha, ahora iluminada, ahora con sombra, que nos lleva siempre a nuevas experiencias. La vivienda es un dúplex a modo de loft donde la parte social se desarrolla abajo y en el piso de arriba la zona íntima.
La luz entre sus espacios ilumina en todas las direcciones, a través de grandes aberturas de vidrio que se levantan contra la solidez del material con que se construye: el hormigón. Un pavimento continuo que se desarrolla desde el interior en planta y se prolonga por el patio trasero. Es pura infraestructura. El manejo de la técnica constructiva y el uso de materiales mínimos, con la piedra en esencia, confirma que la arquitectura puede desnudar las superficialidades temporales presentes y elevar sólo la esencia espacial.
Más que un espacio, sus niveles gradualmente forman un camino a través del cual el exterior y el interior se funden en una forma adecuada y continua totalmente armónica. Una vivienda que ofrece la posibilidad de contemplar las construcciones de techos rojizos, la fachada de la iglesia que corona el distrito y la maravillosa puesta de sol en el horizonte São Paulo. Pura arquitectura!!!
Fotografía [] Pedro Kok - Maracanã House by Terra e Tuma Arquitetos Associados
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