Lo más destacado quizás es la llegada del estilo nórdico, que ha hecho que algunos más asentados como el minimalismo queden fuera de juego. Podríamos decir que la pareja de este año que dejamos atrás ha sido la compuesta por madera y blanco que conforman la casa en sueños.
Como todos los años echamos la vista atrás y recordamos a las gandoras de los concursos y las mejores estancias... No están todas las que son, pero si son todas las que están.
El primer concurso del año fue el de cocinas en el pudimos ver distintos estilos decorativos para dar vida a la cocina. El blanco y los nuevos materiales como los lacados predominan con fuerza, aunque seguimos disfrutando de cocinas calidas y muy familiares. También es el año en el que se han consolidado los nuevos revestimientos como papeles pintados o cristal que le dan estilo a la casa en sueños.
El cuarto de baño siempre es una estancia complicada que denotar en la casa en sueños que requiere muchísima paciencia y atención. Normalmente tienen poca luz y un espacio escaso, así que el ingenio es más importante que nunca. A nivel de estilos, el cuarto de baño es una de las zonas más variadas donde vemos lacados, madera, DIY...
En el dormitorio pudimos ver de primera mano como los textiles juegan un papel muy importante. Gracias a ellos decoramos la cama, le damos un aire nuevo a las ventanas o, incluso cambiamos el estilo de nuestra habitación.
Por último, en salones hemos podido ver durante todo el año como el estilo nórdico ganaba posiciones a marchas forzadas. Cada vez se cuidan más los detalles, se buscan ambientes más tranquilos y el blanco se convierte en el centro de la decoración. A pesar de la fuerte entrada de este estilo no podemos dejar de lado a otros como el minimalismo, el clásico renovado, étnico...