Comenzaron las pruebas hasta dar con el diagnóstico: infección por un virus común que seguramente me habría pegado Alma y que, al pasar al bebé en fase de formación, habría tenido consecuencias muy graves. No había tratamiento y prácticamente ninguna esperanza de que no fuera a tener secuelas importantes.
Así que sólo nos quedaba interrumpir el embarazo o seguir sufriendo cada semana con lo que fuera surgiendo. Jamás nos habríamos perdonado arriesgarnos a darle un mal futuro o dejarle esa carga a Alma, así que nos tocó tomar la decisión más difícil.
Estas semanas de desconexión nos han servido para unirnos más, para pasar el duelo lo mejor que hemos podido, para hacer galletas, para salir fuera y respirar, para saber que el mejor anti depresivo del mundo no llega al metro de estatura y que, por más perra que sea la vida, no toca otra que seguir remando.
No hay consuelo para un aborto. Ni lo hubo la primera vez, cuando hace cuatro años se paró el corazón de nuestro garbancito de nueve semanas, ni lo ha habido ahora. Pero es en estos momentos cuando ves lo fuertes que podemos llegar a ser, la importancia de rodearte de grandes personas y quiénes son tus verdaderos apoyos.
GRACIAS a TI por estar en las duras y en las maduras. Por levantarme cuando estaba por los suelos, aunque tú lo estuvieras igual. Por animarme siempre y que mis sueños también sean los tuyos. Por ser una de las mejores decisiones de mi vida.
GRACIAS a mi pequeña, por ser la mejor medicina para el alma. Por sacarnos una sonrisa cuando sólo nos apetecía llorar. Por llenar esta casa de luz en los días más oscuros.
Y GRACIAS a todas las que me habéis escrito mensajes y emails en este tiempo. Os he leído y me ha llegado todo vuestro cariño. No pensaba escribir este post, porque sabía que me iba a emocionar de nuevo, y no tenía claro si volver o no a retomar el blog… pero aquí estoy.
Siempre llevaremos a nuestro ángel en el corazón, pero ha llegado la hora de salir ahí fuera, de dejar el pan Bimbo con Nutella y de volver a bailar.
**Todas las fotografías son de la sesión navideña con Joanna Noguera
Fuente: este post proviene de Blog de MyLittleBrunch, donde puedes consultar el contenido original.
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