Enseguida, antes de irte, no te olvides de ver: 5 ideas para balcones y terrazas
1. Cabecero de Hello Kitty con detalles en las paredes
Es uno de los cabeceros más populares, debido a la gran difusión de la caricatura alrededor del mundo. Se logra con cortes muy simples y claros de la madera o cualquier otro material resistente y durable. Los colores son solo dos: el negro y el rojo, ambos en sus tonalidades más oscuras. Además, si se desea, se puede jugar con el matiz de la pared, para brindarle mayor vistosidad a la habitación y no dejar ningún lugar sin decoración.
2. Cabecero de contraste de colores simples
Es un diseño muy elegante sobre todo para niñas antes de la adolescencia. Les permite definir un concepto y además une dos aspectos muy importantes: las tonalidades pastel, y las discordancias entre los colores. De igual modo, la colaratura blanca y la pintura con sensación pizarra, brindan una perspectiva clara y abierta, tal y como lo dicen nuestros amigos de Decoideas. Sin duda, es una idea perfecta para desarrollar habilidades creativas.
3. Cabecero en la pared con forma de camiseta
Sino quieres o no puedes fabricar un cabecero, debes jugar con tu ingenio y comenzar a observar un buen lugar sobre el cual dibujar. En el siguiente diseño, observarás como se esbozó una camiseta y se puso el nombre del pequeño al que pertenece la habitación. Para ello solo necesitas de un bote con las pinturas adecuadas, además de un boceto en papel para trasladarlo luego al sitio adecuado.
(Por cierto, si quieres saber cómo pintar las paredes con pinturas sintéticas: te lo enseñamos)
4. Cabecero de sencillo tapizado
Solo necesitarás darle un poco de volumen al cabecero y adquirir papel decorativo con el motivo favorito de tu hijo. Estos tapizados suelen ser muy económicos y solo deberás cambiarlos al menos cada 8 o 10 meses para mantener la durabilidad y la calidad de los materiales. Si lo deseas, también puedes comprar un poco de poliester transparente para proteger y dar brillo a la estructura.
5. Cabecero en madera
Naturalmente no podíamos dejar una superficie tan maleable como la madera por fuera. El siguiente diseño nos enseña la manera adecuada de realizar marcos sencillos y a la vez muy elegantes que a los niños les puede gustar. Pero como sabemos de los juegos que pueden suceder allí, el interior del cabecero llega acolchonado para proteger a los menores mientras se divierten.
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Son cabaceros muy creativos y perfectos para nuestros hijos: la estancia en sus habitaciones, jamás volverá a ser igual, si usas un poco de tu imaginación y buen gusto.
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Fuente: este post proviene de Esmihobby, donde puedes consultar el contenido original.
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