Este pequeño apartamento de 45 metros cuadrados tiene una decoración muy cálida y un concepto abierto donde todo esta conectado. La calidez la consigue con detalles como la pared blanca de ladrillo caravista, tonos pastel y el uso de elementos de madera natural.
El dormitorio tan solo se separa del salón por una cortina y esta situado sobre una base de madera que es utilizada como armario. Detalles como las lámparas sin pantalla aportan sencillez al diseño.
Las paredes están llenas de detalles, varios cuadros de animales o plantas sobre fondo blanco aportan naturalidad al apartamento. En este caso concreto el alce contrasta con las baldosas de la pared de la pequeña cocina.
La cocina comunica con el salón mediante una pequeña barra de bar plagada de detalles como la columna que actúa como pizarra, la pequeña vinoteca o los taburetes Tolix.
En la pequeña terraza utilizan los asientos como lugar de almacenaje, debido al tamaño del apartamento tienen que procurar aprovechar hasta el último rincón.
El baño rebosa originalidad por las cuatro paredes. Sus azulejos se han convertido en un enorme tablero de Scrabble con palabras como baño, meditar o champú. Además el revestimiento de la bañera con madera le da personalidad propia.
La preciosa lámina del mono con un micrófono es la estrella de la decoración del servicio. Su tono oscuro, junto al suelo y una de las paredes en negro, con los azulejos colocados en forma de nido de abeja, contrastan con el resto de las paredes en blanco consiguiendo un resultado excepcional.
Por último aquí tenéis el plano del apartamento para que podáis ver con detalle la distribución de este pequeño apartamento.
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Fuente: este post proviene de Sárzena. Decoración y mobiliario., donde puedes consultar el contenido original.
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