Bien, pues hace unos días, por casualidad, me topé con lo que parecía ser un anuncio de Chanel. Sin embargo, se trataba del ya tradicional corto que cada año presenta la maison en una ciudad diferente. Esta vez se proyectó en la ciudad austriaca que es sede del desfile Paris-Salzburg de Métiers dArt, una vez más con Karl Lagerfeld tras la cámara.
El corto de este año me ha gustado especialmente; no sólo por retratar la leyenda que antes os he mencionado (Coco no podía ser otra que Geraldine Chaplin), sino también por la efusiva historia de amor entre la emperatriz Sisi/doncella (encarnada en la top y musa Cara Delevingne) y Francisco José I de Austria/botones (Pharrel Williams).
Bueno, ante todo me vais a perdonar que hable de algo tan frívolo como puede ser esta casa de moda, pero personalmente no hay símbolo que en mi opinión destile más elegancia que las dos "ces" cruzadas de la marca. Su esencia me parece que en gran medida ha influido nuestro modo de hacer y ver las cosas, y no solo en cuanto a moda, que por supuesto, sino por ser una de las primeras mujeres en ser completamente libre.
Me quedo con la última frase de Coco cuando se queda prendada de la chaqueta del botones: "Pero yo, voy a hacérmela para mi".
Hasta la próxima,
Irina Vermeer
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