Como alma que lleva al diablo entre dispuesta a encontrar aquello que mejor me fuese, pero claro... entras con una idea y cuando llegas a la sección de cojines y ves todo aquello! Se me hizo una montaña!. Estuve como una hora mirando combinaciones posibles y al final me decidí por lo básico, unas fundas grises y unas negras pero.. tenia que añadirle un toque de color.
Miré y remiré y no vi nada que a mi gusto quedara bien, así que seguí mi ruta por Ikea.
Al llegar a la sección de menaje de cocina vi una fantástica bandeja en color mint (por cierto, la última que quedaba), pero claro, para que quiero yo una bandeja si no tengo cocina? (ya os lo explicaré en otro post), pues para no quedarme sin ella la cogí, no se para qué pero la cogí!.
Después de hacer media hora de cola en caja y pagar, nos fuimos al Leroy Merlin, ya que mi marido necesitaba mirar unas cosas y allí lo vi!, el cojín que me faltaba y con un color turquesa fantastico!!!!! En fin lo cogí y por fin ya tengo la combinación del sofá echa.
En cuanto a la bandeja, recuperé unas patas de un perchero y he decidido que la voy a usar para la parte de arriba de las patas y así tendré una mesa auxiliar para el sofá.
A mediados de este mes tengo que volver para comprar un zapatero para la entrada. Ya os contaré mi nueva aventura de momento aquí os dejó lo que compré.
¿Creéis que he acertado con la combinación de cojines?
Fuente: este post proviene de Deco little house, donde puedes consultar el contenido original.
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