
Sí, lo sabemos, volver a la rutina nunca es fácil porque se juntan una serie de circunstancias nada agradables: madrugar, asumir las tareas de cada día, hacer cosas que no nos apetecen mucho..., en definitiva, sentir que la responsabilidad ocupa de nuevo un lugar preferente en tu vida, por encima del ocio y del placer. Pero ¡no está todo perdido! Aún podemos dar una vuelta a nuestro hogar y, al menos, hacer de él un lugar agradable al que merezca la pena volver cada día. Hoy te damos algunos consejos para ser feliz en tu casa gracias a la palabra mágica: orden. Tener todo organizado está demostrado que nos hace sentir más relajados y contentos. Vamos a ello.
Sé realista pero feliz
No podemos empezar la casa por el tejado y pretender que, un hogar en donde no reinaba el orden precisamente, ahora sea el paradigma de la organización y el equilibrio. Para empezar, no todo el mundo cuenta con los mismos recursos (espacio, tiempo, ganas...) para conseguirlo. Como en cualquier otro proyecto o reto, el primer consejo es ponerse metas realistas. En este sentido, los expertos recomiendan ir 'piano, piano' e ir dejando fluir nuestra vena organizativa. Un ejemplo muy claro: resulta muy útil escribir, cada lunes, la tarea o el reto que nos pongamos semanalmente. Revisar todos los papeles que se acumulen en cajones, discriminar entre válidos e inútiles, reciclar los segundos, administrar los primeros y, finalmente, archivarlos, puede ser el primero. ¿Qué opinas?
Encontrar el orden donde nunca imaginaste
¿Qué te parece empezar por limpiar ciertas zonas y rincones? Y con limpiar nos referimos a toda acepción que pueda tener el verbo; puedes empezar por desprenderte de cosas innecesarias que mantienes en casa y que solo te quitan espacio. Por ejemplo, la ropa que ya no uses (y puedas donar) o trastos, muebles, libros y películas con los que te ocurra lo mismo. Si vives en una ciudad, te será muy fácil llevarlos a una asociación, mercadillo o lugares de intercambio de bienes culturales que siguen aflorando hoy en día.Al mismo tiempo que te desprendes de trastos, puedes adquirir muebles concebidos para el orden. Ya sabes, los típicos funcionales y cómodos que nos sirven para organizar todo lo que no queremos que esté visible. Haz uso de estanterías; te ayudarán a no tener cosas por medio y, en cambio, a mantenerlas a la vista motivándote a tener decorado dicho rincón.
Inspírate con la fotografía de a continuación. ¿A que nunca habrías imaginado que el orden pudiera ser decorativo? Puedes hasta colgar tu cámara de fotos en la pared y matar dos pájaros de un tiro. Pues así, con tantas otras cosas; ya es hora de utilizar las paredes para algo más que colocar nuestras láminas preferidas.
Fuente: Madhatterzone/Unsplash

Otros trucos exprés
- No te alteres: si eres maniático/a del orden puede que te produzca cierto estrés dar el cambio definitivo a tu casa. Piensa que no hay prisa y que el resultado merecerá la pena. Además, los pequeños hitos organizativos semanales de los que te hablábamos antes te ayudarán a sentirte satisfecho.
- Si te cuesta desprenderte de algo, cámbialo de lugar: nos referimos a llevarlo al típico trastero, a la casa del pueblo o a algún sitio donde sepas que puedes contar con dicho artilugio, pero sin tenerlo en casa, de por medio.
-¿Tienes terraza? Si está cubierta, es un buen lugar donde guardar ciertas cosas durante los meses de otoño e invierno, que apenas se utiliza. Eso sí, bien forradas y siempre y cuando se puedan mantener en condiciones de relativa humedad, sin deteriorarse.
- Aplica el sentido común y lee consejos como los que te ofrece el blog de Vivienda Saludable.