Las dos clases de papeles pintados más importantes son el papel tradicional y el que tiene relieve. El convencional es el que es una lámina de papel que puede ser de cualquier gramaje y de cualquier color o estampado. El que tiene relieve, por su parte, aporta una textura que se marca en la superficie. Suelen imitar al estuco, los hay aterciopelados…en fin, infinidad de modelos dónde elegir.
Cada modelo de papel puede inspirar y cambiar tanto una estancia que creo que son imprescindibles en cualquiera aunque sea decorando una de sus paredes. Así que aquí os dejo con varios modelos con y sin relieve que son idóneos para los salones.
Con este papel tan primaveral, por ejemplo, consigues un ambiente mucho más acogedor e incluso, al tener mucha presencia del color blanco, más espacio visual.
Aquí tenéis un ejemplo más sobrio pero donde el indiscutible protagonista pasa a ser el papel, dando la decoración que justo se buscaba a la pared de la televisión.
Este modelo con relieve sólo es apto para espacios muy amplios pero quedará muy bien si pretendes tener una decoración diferente.
Sencillísimo me ha parecido este papel, a la vez que elegante. Perfecto para cualquier tipo de salón y con el relieve justo, debes tomar nota de esta imagen.
Imágenes: coloresencasa.blogspot.com, blogmuebles.com, baires-decodesign.com