Esta es la casa donde Jessica y su familia han estado viviendo durante los últimos años. Se trata de un interesante experimento personal que viene a demostrar:
Que se puede vivir en un espacio reducido.
Reutilizar los materiales de la propia vivienda a reformar, más los recuperados de otras obras.
Invertir el mínimo de dinero al aprovechar todo lo posible.
Disminuir el impacto de la obra sobre el entorno.
Bajar drásticamente el consumo (compra) de materiales de obra y de mobiliario.
Reciclado en su máxima expresión, siendo esta la cuarta vez que se da uso a este edificio.
Minimizar la huella ecológica de vivienda y familia.
El techo, ya bastante deteriorado, fue sustituido por un techo verde, plantado con musgo y helechos. Esto ofrece una buena solución para aislar la vivienda del frío y/o el calor, a la par que es económico. Y muy en la linea de esta decoradora, cuya filosofía de vida (y aplicable a su trabajo) es la del respeto por el medio ambiente, la sostenibilidad y la construcción ecológica. Conceptos, para mi también, muy importantes e interesantes, y que me encantarían aplicar a mi vida y mi casa.
Lo primero que hizo fue rediseñar el interior para sacarle el máximo partido, ya que es pequeño. La cocina, comedor y salón comparten el mismo espacio, y tienen el techo a dos aguas (lo que por otro lado amplía visualmente el espacio). Los sofás hacen las veces de camas para cuando tienen visitas y debajo de ellos, en cajones integrados, se esconden los juguetes de los niños.
Baño y dormitorio infantil (que también tiene una cama de matrimonio para las visitas y un armario extraíble) tienen los techos más bajos para albergar en la parte superior (altillo) el dormitorio del matrimonio, al que se accede por una escalera de mano desde el salón.
El tema de la sostenibilidad ha sido llevada también al jardín - huerto - granja. Intentando ser autosuficientes, han construido un invernadero donde cultivan frutas y verduras, crían pollos para consumo de carne y gallinas para huevos, se dedican a la apicultura... y se hacen su propio queso de cabra con la leche que un vecino les da.
A mi personalmente me encanta esta visión idílica de vida en el campo...
Imágenes vía...
Bueno, y ya sabéis, si necesitáis algún consejito... aquí estoy para serviros.
Hasta el sábado y ¡a disfrutar!
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