Las cajas de madera son muy sencillas de encontrar, posiblemente en la frutería más cercana podemos pedirsela a nuestro frutero de confianza. Una vez la tengamos el nivel de complicación dependerá de nosotros, la podemos dejar en bruto simplemente con un leve lijado, podemos pintarla, barnizarla, decorarla con algún texto, ponerle ruedas… Pero nada que no podamos hacer con un poco de maña.
Estas cajas nos serán muy útiles en cualquier rincón de nuestro hogar: para guardar las mantas a los pies del sofá, para almacenar zapatos, como estantería, como mesita auxiliar… Aquí os dejo unos ejemplos para que tomeís nota.
Vía imágenes:Pinterest
¿Qué os parece esta idea de reciclar cajas de madera?
¿Os gustaría tener alguna?