Aprovecha cada rayo de sol que entre en casa
Si tu casa no tiene muchas oportunidades de recibir la mejor fuente de energía y luz que tenemos: el sol, aprovecha todos los rayos que entren al máximo.
Tus cortinas deben de ser finas que dejen pasar la luz natural, invierte en aislamiento para tus ventanas y renuncia a las cortinas gruesas que te protegen del frío pero no dejan pasar el sol.
Un buen espejo colocado en la pared que haya frente a la ventana reflejará la luz natural y tendrá el mismo efecto con la luz artificial, sólo tienes que instalar un espejo en paralelo con alguna lámpara de mesa para iluminar más una estancia.
Salón reformado por Agustí Costa – Fotografía David Cardelús
Ilumina bien con luz artificial
Un espacio pequeño debe tener una iluminación potente y difusa. Para conseguirlo hay que combinar tres tipos de luz:
1.- Luz General.
2.- Luz Central con lámparas de techo.
3.- Luz puntual o de ambiente que sirva para leer o iluminar alguna pieza especial de la habitación.
También debes tener en cuenta estas claves:
Nada de lámparas grandes que hagan más pequeño el cuarto, especialmente si los techos son bajos.
Apuesta por los focos, tienen potencia en la luz y casi ni se ven.
Instala lámparas de pie y puntos de luz en alguna esquina estratégica.
A la hora de escoger iluminación para tu comedor, ten en cuenta esto:
Coloca una lámpara de techo que ilumine de forma cálida la comida. Puedes escoger un modelo que sube y baje para tener una iluminación puntual o general según sea el momento.
Si optas por una lámpara colgante recuerda que la distancia es muy importante. Debe haber de 50 a 80 cm de distancia entre la mesa y la lámpara para que no te deslumbre cuando te sientes a comer.
La lámpara nunca debe ser más grande que la mesa. Si tu mesa es alargada lo mejor es que ilumines con varias lámparas pequeñas en lugar de una sola grande.
No pongas demasiada luz sobre la mesa.
Dormitorio reformado por Egue y Seta.
Escoge bien tus bombillas
El 16% de lo que nos gastamos en energía en casa es por la iluminación, según nos cuenta la ‘Guía Práctica de la Energía. Consumo Eficiente y Responsable’ publicada por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDEA). Merece la pena detenernos a pensar qué bombillas serán las más eficientes para ajustar nuestro gasto y, de paso, iluminar mejor nuestro hogar, ¿no? Pues vamos a ello.
Hoy en día, casi todos usamos ya las bombillas de bajo consumo. Hay un 83% de penetración en nuestros hogares, pero si afinamos más y vemos los números absolutos, las bombillas convencionales siguen ganando, hay todavía más. La media de bombillas de bajo consumo por hogar suma 7 y la media de bombillas convencionales suma 8,3.
¿Por qué? Porque todavía no ha pasado el tiempo suficiente para que la balanza vaya hacia el otro lado. La ventaja de la bombilla de bajo consumo es evidente: funciona igual que la tradicional y usa entre un 50% y un 80% menos energía y, además, dura más. Pero … es más cara que la tradicional y, lo peor, debe reciclarse en puntos especiales porque tiene un gas con una pequeña porción de mercurio que la convierte en un residuo peligroso.
Por eso, hay que apostar por las bombillas LED. Son las más eficientes y menos contaminantes. El pero … su precio. Quizá esa la razón detrás de su baja penetración en los hogares españoles, sólo un 1%. Aunque yo insisto, si puedes usa LED: dura más, es más ecológica y ahorra el máximo de luz.
Los trabajos mostrados en este artículo son obra de los profesionales que publican sus proyectos en Espaciodeco, un portal de decoración de hogar que ofrece el primer servicio de decoración online low cost de España.