• Crea la ilusión de espacio eligiendo colores claros y neutros, tales como cremas, blancos y marrón claro. Pinta el techo de un tono más claro que el color de la pared para hacerlo ver más alto. Evita los colores oscuros para pintar tus paredes, porque esto hará que la habitación parezca más pequeña.
Foto: Valdirose
• Déjate aconsejar en las tiendas de muebles por aquellos muebles que son multifuncionales, es decir, que cumplen dos y tres funciones al mismo tiempo: una mesa que se convierte en una cama, un sofá que tiene cajones para guardar objetos, etc.
• También compra muebles que puedas apartar o guardar cuando no los tengas que usar. Por ejemplo, las sillas de la mesa del comedor, o de la cocina, que puedan meterse debajo de la mesa, ayudará mucho a reducir espacio.
Foto: Fantastik Frank
• En el caso de que el cuarto también sea pequeño, aconsejamos poner espejos. Espejos en el armario, o en la pared harán el efecto óptico más amplio. Además, puedes poner alfombras de rayas, o papel pintado en las paredes de rayas.
• Si cuentas con hijos, la idea de que duerman juntos no solo te ahorrará espacio si no que les encantará, ¿por qué? Porque las literas son los aliados de los niños, y de las mejores soluciones para una casa pequeña.
Fuente: Draw Home
• Aprovecha todas las esquinas de la casa, suelen ser espacios inutilizados. Coloca las estanterías en estas esquinas, mesas de comedor también pueden ser otra opción. Mesilla de noche, paragüeros o percheros, baúles…. ¡Échale imaginación!
Lo importante es que aproveches cada espacio vacío de la casa, pero no para recargarla, si no para colocar lo estrictamente necesario. Detrás de las puertas, encima de los armarios, debajo de las camas o los sofás, encimeras sin nada debajo, paredes que no se ven…. ¡Verás como se puede disfrutar del espacio aunque sea pequeño!