Sin mayor apreciación que la de conseguir un espacio diferente, a veces, sea por composiciones, por acabados o por divisiones, descubrimos la esencia de un interior casi en su arquitectura. Espacios creados, ya sea por un tabique de cristal, o simulados, por una composición de mobiliario que difiere y construye. Pero cuando son estos los casos en los que disfrutamos sin mas, de un trabajo equilibrado, es cierto que nos asombra el resultado.
Hoy arrancamos la semana, con el que podría ser un espacio mimado, creado y sencillo y del cual nos podremos enamorar a un simple vistazo.
Un apartamento parisino con una distribución muy sencilla y peculiar, plagada de complementos y color con el que admirar la propia construcción de los elementos.
Cada vez están mas de moda los tabiques acristalados separando cocinas, con un aire industrial, de carpinterías de color, o con paneles inmensos que planifican un espacio mas moderno y minimalista.
Inspirados, en un aire tradicional y clásico, esta vivienda se abre a la luz, plagando las estancias principales de un pulcro blanco con el que rebotar y ampliar la perspectiva. Para luego si, en cocina, dormitorios y hasta baño, perderse en una pincelada de color mint con el que la delicadeza y el color se dejan sorprender.
Una muestra diferente para crear interiores, que sin duda, sera perfecta para inspirar algún nuevo proyecto.
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