de la que nace en el valle
a golpes de sol y de agua,
tu nombre me lleva atado
en un pliege de tu talle
y en el viés de tu enagua.
Porque te quiero a ti
porque te quiero,
aunque estas lejos
yo te siento a flor de piel.
Joan Manuel Serrat,
Buscaba la sensibilidad y la encontré, como siempre, en cualquier verso de Serrat.
Desgarrar el alma con sus canciones no duele porque de las heridas brotan emociones. Y así mejor porque ya sabemos, las cicatrices son para toda la vida.
Muchos escriben de amor
pero luego está Serrat.
via Martha Stewart
Y como cada viernes, buscaba algo distinto para mi paladar y el vuestro. Lo he encontrado en la hierbabuena. Un toque milenario, nada nuevo. Pero es que, como pasa con las letras de Serrat, la naturaleza nunca se equivoca. Tampoco cuando decide colarse en la cocina.
¿Un tentempié? Una tostada, queso y unas hojitas de hierbabuena.
¡Bon appétit!