De nuevo os enseño una habitación en la que se han utilizado unos muebles en madera que yo en un principio hubiera dado por perdidos, pero que con los complementos adecuados, predominantemente en color mint, no solo quedan my bien en este dormitorio sino que además le dan una calidez que difícilmente sería posible alcanzar con los muebles blancos que parece que reinan en las habitaciones infantiles (y que conste que yo me incluyo en este último grupo).
A pesar de que ni el color ni el acabado de la madera son mis preferidos, me termina gustando el conjunto final.
Mención aparte para este maravilloso espejo de mimbre que me ha enamorado desde el primer momento. Las estrellitas le dan color y alegría a la pared.
Y las cajas, ya sea en forma de baúl o maletín, completan el almacenaje, pudiendo guardar en ellas juguetes o ropa de cama y baño.
Ya veis, de nuevo os repito lo de siempre ¡no tiremos los muebles sin darles una segunda oportunidad! Algo que de primeras nos puede parecer anticuado y fuera de lugar puede llegar a convertirse en una pieza esencial de alguna de las habitaciones de nuestra casa, ya sea emplazándolo en otra situación o dándole un nuevo aire.
Como ejemplo esta otra habitación infantil con muebles vintage que os enseñaba hace tiempo. ¡A reutilizar se ha dicho!
Imágenes: Mon Bébé Chéri.
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