Una solución de lo más original para conseguir luminosidad a una zona interior en la que apenas recibe luz exterior, crear un invernadero de color turquesa dentro de casa. Una estacia tranquila que nos puede dar mucho juego dentro de la vivienda, bien para desayunar, zona de lectura o simplemente para relajarte y leer en soledad.
El resultado no podría haber sido más increíble: todas las estancias que permanecen a su alrededor, han ganado en amplitud y luminosidad, algo que siempre buscamos en un interior. Inspirate!!!
photography by La Traviesa