Tengo una y es porque me la regalaron en el banco al hacer la hipoteca del piso. De hecho, los canales estuvieron sin sintonizar hasta que un hombre entró en mi casa para quedarse.
Independientemente de mi opinión personal o poca afición por su contenido hay algo que es universal y común para todos en relación al continente o artiluguio y en lo que seguro estaréis de acuerdo... Lo antiestéticas que resultan como elemento integrante de cualquier decoración.
Podemos disimularlas ocultándolas dentro de un mueble o podemos buscar fórmulas para "maquillar" nuestro salón de forma que éstas pasen algo más desapercibidas o que, como mínimo, tengan menos protagonismo o llamen menos la atención.
En el caso de los que os guste la decoración mayoritariamente basada en el blanco, podéis optar por una tele blanca -que aunque más caras, haberlas haylas-.
Y en el caso que ya tengáis el aparato en cuestión -que probablemente será negro- podéis optar por utilizar el recurso de la pintura mural para que ésta quede más integrada. ¿Cómo? Utilizando colores oscuros en tonalidades "casi negras" bien sean grises, azules, verdes...
Ya he manifestado alguna vez (aquí y aquí) que me gusta bastante el color oscuro como parte de la pintura de una vivienda, así que en mi caso esta opción no supone un problema.
Vía: Apartment Therapy y Pinterest
En otro post continuaré en mi cruzada de ocultar el televisor (para, por lo menos, frenar mis ganas de vendérmela) utilizando otro recurso que admite cualquier color en las paredes de vuestro salón.
¿No os parecen un verdadero horror las "teles"...?
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¿...o creéis que exagero?
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¿Cómo tenéis integrado el televisor en vuestros salones?
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Besos
G