No cabe duda de que los televisores han ido ganando con el paso del los años mucho peso en la decoración de los salones. Hay una tendencia a la hora de optar por televisores cada vez más grandes y que no desentonen para nada con el resto de la decoración de la estancia. En los últimos años la venta de televisores de grandes dimensiones se ha disparado y con ello la inventiva a la hora de colocar los mismos en el salón de casa.
En el siguiente artículo vamos a darte algunas ideas a la hora de colgar o poner el televisor en el salón o el comedor de casa.
Sobre un mueble
La opción más común y habitual sigue siendo la de poner el televisor encima de un mueble. Es tan fácil como poner la televisión en un mueble de una dimensiones concretas y conseguir que encaje perfectamente en el mismo. El gran problema de dicha opción sigue siendo la gran cantidad de cables que hay y que no benefician en nada a la decoración del lugar. Es un elección aceptable cuando no quieres complicarte la vida y la casa no ha sido reformada.Colgada en la pared
En los últimos años se ha puesto muy de moda colgar la televisión en la pared del salón. Se cuelga de la misma manera que se haría con un cuadro y tiene la ventaja de que se puede poner a la altura deseada. El gran problema de esta opción es que va a requerir algo de obra sobre todo a la hora de conseguir que los diferentes cables no se vean y queden ocultos. Otro de los inconvenientes es que se resulta complicado conectar la tele a otros aparatos como el router o una consola y evitar que se vean los diferentes cables.Colgada en un panel
Si no te gusta que la televisión esté colgada directamente en la pared, puedes optar por poner la misma en un gran panel. Lo bueno del panel es que ayuda a ocultar los diferentes cables y permite una buena decoración en toda la estancia. Aparte de ello, el propio panel puede combinar con el resto del salón logrando cierto equilibrio en lo que a la decoración se refiere.En una estantería
Una manera de colocar el televisor es en una estantería. De esta forma puedes usar la misma para poder almacenar otros objetos del salón. En este caso el televisor no se convierte en un punto visual dentro de la estancia y pasa mucho más desapercibido. Colocar el televisor en una estantería es ideal en aquellos salones que no son demasiado grandes y en lo que hay que aprovechar cada espacio.Como si estuviera suspendido en el aire
Hay una manera muy original de poner el televisor es que parezca que está suspendido en el aire. De esta forma hay que colocar el TV en el nicho de una pared y proyectar el mismo hacia fuera, creando una ilusión óptica para que parezca que se encuentra suspendido en el aire. Esta opción es perfecta a la hora de aprovechar el mayor espacio posible en el salón y evitar sobrecargarlo demasiado.Acoplada al fondo del salón
Si no quieres que la TV destaque dentro de la decoración del salón puedes acoplarla en el fondo y hacer que no se note cuando está apagada. En tal caso es importante el crear un ambiente oscuro detrás de la TV con tonos como el negro o el gris oscuro.Formando parte de una colección de cuadros
Una manera realmente original de poner la TV en el salón es la de integrarla dentro de una galería de cuadros. Con ello se consigue que el TV pase desapercibido ya que forma parte de dicha galería. Puedes poner cuadros de diferentes tamaños y formatos y conseguir un equilibrio dentro de la decoración del salón.En un mueble giratorio
Otra manera de poner el TV es en un mueble giratorio. De esta forma vas a conseguir ver el aparato desde cualquier parte del salón. En el mercado puedes encontrar muebles que giran 45, 90 y hasta unos 180 grados. El problema de este tipo de muebles es que son algo caros y no son aptos para todos los bolsillos. En el caso de buscar algo más módico puedes optar por poner un mueble que posee un brazo articulado con el que mover la televisión.En definitiva, como has podido ver son muchas las formas que existen a la hora de colocar el televisor dentro del salón. Hasta hace unos años la gran mayoría de las personas optaban por poner el televisor encima de un mueble. La aparición en el mercado de televisores de grandes dimensiones ha provocado, que muchas persona opten por colgarlos en la pared como si fuera un cuadro y aprovechar al máximo todo el espacio de la estancia en cuestión.