Cocinar puede ser una tarea divertida y gratificante, pero cuando se trata de limpiar el menaje de cocina, especialmente si ha sido quemado, puede parecer una tarea desalentadora.
Afortunadamente, hay varias formas efectivas de limpiar el quemado de las sartenes y cacerolas sin poner en riesgo el menaje.
Utilizar bicarbonato de sodio y vinagre es una excelente manera de limpiar quemaduras. Para hacerlo, mezcla una taza de agua con una cucharada de bicarbonato de sodio y otra de vinagre blanco.
Luego, caliente la mezcla en la sartén o cacerola que deseas limpiar y frota el quemado con un cepillo o esponja suave. Deja reposar por unos minutos y luego enjuaga con agua tibia.
Otra opción efectiva, es utilizar una pasta hecha con bicarbonato de sodio y agua. Para ello, mezcla una taza de bicarbonato de sodio con suficiente agua para crear una pasta.
Luego, aplica la pasta en la superficie quemada de la sartén o cacerola y déjala actuar durante unos minutos antes de frotar con un cepillo suave. Finalmente, enjuaga con agua tibia y seca bien.
El detergente líquido para platos también puede ser muy efectivo para limpiar quemaduras en la sartén o cacerola. Simplemente vierte unas gotas de detergente líquido para platos en la sartén o cacerola y luego agrega suficiente agua para cubrir el área quemada.
Deja reposar por unos minutos antes de frotar con un cepillo suave. Finalmente, enjuaga con agua tibia y seca bien.
Es importante tener en cuenta que, dependiendo de la gravedad de la quemadura, estos métodos pueden tardar más o menos tiempo en funcionar.
Pero utilizando cualquiera de estos métodos, puedes limpiar tu menaje de cocina sin poner en riesgo su integridad. Con un poco de tiempo y paciencia, puedes dejar tus sartenes y cacerolas como nuevas.
10 Productos caseros que puedes utilizar para limpiar sartenes y cacerolas
1. Bicarbonato de sodio: mezcla bicarbonato de sodio con agua para crear una pasta y aplícala en la sartén o cacerola para quitar la suciedad y las manchas.2. Vinagre blanco: mezcla partes iguales de vinagre blanco y agua caliente en la sartén o cacerola. Déjalo reposar durante unos minutos y luego lava el interior de la sartén con agua y jabón.
3. Sal: espolvorea sal en la sartén o cacerola y frota para quitar las manchas y la suciedad. Después lava con agua y jabón.
4. Aceite de oliva: aplica aceite de oliva en la sartén o cacerola y frota suavemente con una esponja para quitar la suciedad y las manchas. Después, lava con agua y jabón.
5. Jugo de limón: rocía jugo de limón en la sartén o cacerola y frota con una esponja para quitar manchas y realzar el brillo.
6. Papel de aluminio: usa una bola de papel de aluminio para frotar suavemente en la sartén o cacerola y quitar las manchas y la suciedad incrustada.
7. Detergente líquido: llena la sartén o cacerola con agua caliente y agrega detergente líquido. Remoja durante unos minutos y luego lávalo como de costumbre.
8. Agua y jabón: una solución simple de agua y jabón es a menudo suficiente para limpiar la sartén o cacerola.
9. Harina: esparce harina en la sartén o cacerola y frota suavemente con una esponja para quitar las manchas y la suciedad.
10. Agua con gas: vierte agua con gas en la sartén o cacerola y deja reposar durante unos minutos. Luego, lávalo como de costumbre con agua y jabón. El gas ayuda a soltar la suciedad y las manchas.
Fuente: este post proviene de La maleta de Maggie, donde puedes consultar el contenido original.
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