La pared del cabecera la decoré con tres cuadros RIBBA (de Ikea) en blancos y fotografías en blanco y negro. La paleta de colores que he utilizado en la habitación se basa fundamentalmente, como puedes ver, en el blanco, el negro y el marrón claro de la madera. Además, juego con los textiles de los cojines y de vez en cuando me apetece aportar una nota de color con estampados en coral y blanco, como puedes ver en la foto a continuación.
Para las pulseras y los anillos que más suelo ponerme, utilizo un cuenco blanco geométrico y un pequeño bol para aperitivos, ambos de Maisons du Monde.
En mi habitación he seguido una serie de pasos para mantenerla lo más ordenada posible:
#1. Collares. Estaba harta de que se enredaran en el joyero, además como me chiflan los collares y colgantes, el número iba creciendo y el espacio menguando. Así que tuve que pensar en otra manera de guardarlos. Y esa fue la opción. Una percha con ganchos para colgarlos y tenerlos a la vista. Así lo tengo más fácil para decidir cuál ponerme y no se enredan. La perchita la compré en Primark, aunque también la he visto en Bricor.
#2. Zapatos. Tenía claro que debía destinar un espacio del armario a los zapatos. Podría haber optado por un zapatero, pero el espacio en la habitación no es muy amplio, así que lo integré en el armario. Dejé una pequeña columna de baldas al extremo del armario para colocar los zapatos de la temporada. Los zapatos de la temporada que no utilizo los guardo en estas cajas de Ikea, en la parte inferior del armario. Como tengo el pie pequeño, me caben dos pares de zapatos en cada caja
#3. Cojines y colchas. La cama la decoro con cojines, pero a la hora de dormir utilizamos cada uno nuestra almohada, así que necesitaba un lugar donde depositar los cojines por la noche. El lugar elegido fue la cesta que veis en las fotos. La compré de liquidación en Ikea, porque era una edición limitada y me salió muy económica.
#4. Ropa de temporada y otros. Unas grandes cajas flexibles en el altillo del armario son suficientes para guardar la ropa de temporada y otras prendas como mis trajes de flamenca para la Feria (;-D). Aunque no lo parezcan, estas cajas tienen mucha capacidad.
#5. Ropa interior. Tengo una cajonera de cuatro pequeños cajones pero con mucha profundidad. En ellos tengo ordenada mi ropa interior, calcetines, medias y pantys.
#6. Bolsos. Una caja abierta sin tapa fue la solución que encontré para guardar algunos de mis bolsos (el resto los guardo en el canapé de la cama).
#7. Pantalones. La pantalonera fue la mejor opción para los pantalones de mi marido y los míos. Es fácil cogerlos y guardarlos y extrayendo la pantalonera tienes todos los pantalones a la vista. En cualquier tienda de bricolaje las venden.
A mi desde luego estos pequeños trucos me han funcionado. Sí que es cierto que cuando compré la habitación, la cama la elegí con canapé para poder almacenar cosas como ropa de cama, los rellenos nórdicos en verano, etc. Y me resulta muy útil.
La mecedora Eames no podía faltar en un rinconcito, queda tan bonita…
Elegí puertas blancas de cristal correderas para el armario, pues amplían visualmente el espacio y reflejan la luz que llega desde la ventana, que queda enfrente.
Tres pequeños percheros fijados a la puerta del dormitorio son un recurso muy útil para colgar la blusa que me pondré a la mañana siguiente, para colgar la bata de “guatiné” (o boatiné jiji) o alguna bufanda.
Mis collares siempre a la vista colgando de la pared.
En mi armario tengo una parte alargada con la medida justa de mi vestido más largo:
Y hasta aquí mi “master room tour”
Espero haberte podido dar alguna idea para ordenar tu habitación. Además, me gustaría, que si pudieras aportar alguna otra idea, lo hicieras en los comentarios al post. Gracias
Chaíto!!
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