Si ya estás decidido a hacer estas mejoras en tu baño, lo ideal es calcular cuánto más o menos nos podemos gastar y empezar a ver qué formas son más sencillas para pagar una cuota mensual que podamos asumir en nuestro presupuesto familiar. Os vamos a dar algunas pautas de lo que siempre debemos mirar antes de contratar un préstamo o hablar con una financiera...
En primer lugar, ver qué cantidad de cuota es asumible por nosotros, cuántos plazos serán necesarios y qué gastos de apertura (un extra que se paga al abrir el crédito) y cancelación (el recargo a pagar en caso de querer liquidar la deuda antes) tenemos. Este último punto a veces lo pasamos por alto y siempre debemos tenerlo muy presente en el calculo final.
Por supuesto, informarnos sobre el tipo de interés nominal que vamos a tener, en este punto es donde más debemos comparar y conocer las condiciones de distintas entidades. En mucho casos encontramos financiación sin intereses a un año o seis meses, que siempre es la opción más deseable. Aunque mucho cuidado porque en prestamos rápidos, hay gente que ha llegado a pagar hasta un 20% de interés.
Fuente: Pixabay/WerbeFabrik
Lo mejor como hemos indicado antes es buscar una financiación con la propia empresa que va a hacerte la reforma en el baño. Si en algún momento necesitas consultar o preguntar qué tipo de financiación es la más adecuada para ti no dudes en ponerte en contacto sin compromiso alguno con Bañeraporducha.com. Ellos van a poder ofrecerte una alternativa cómoda para financiar tu reforma. Si ya tienes claro que quieres tener el baño de tus sueños, sólo tienes que informarte bien para no tener problemas y que todo salga perfecto.
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