Las dimensiones ajustadas han sido una constante con la que el mundo de la decoración ha tenido que lidiar desde siempre. En la sociedad actual se hace necesario profundizar en las medidas y soluciones que se deben tomar para optimizar las estancias, ya que proliferan las reducidas, y todo ello sin mermar la importancia del estilismo.
La distribución del mobiliario es algo que no puede obviarse, puesto que matices como dónde incide la luz que entra por la ventana o cuál es la orientación de la cama, determinan las sensaciones de amplitud que percibimos. Además, es de especial relevancia para nuestro objetivo el mobiliario versátil, que puede usarse para dos funciones distintas, lo que reducirá el número de objetos que necesitamos en nuestro hogar.
Estos y otros trucos son los elementos que ayudarán a crear un dormitorio diáfano, versátil y despejado que aportará una mayor amplitud visual e, incluso, funcional. Si sigues nuestros consejos comprobarás que no hace falta una gran estancia para no sentirse agobiado: un poco de orden e imaginación y conseguirás resultados increíbles en los ambientes más reducidos, y todo ello sin grandes reformas.
Un baúl versátil
La utilización de un mueble para diferentes funciones es uno de los objetivos de quien pretende ganar un hueco en su lugar de descanso. Una fuente de posibilidades son los baúles. Además de liberar espacio permitiendo el almacenaje en su interior, estos artículos de vetustos orígenes tienen la capacidad de servir como mesas de servicio, o incluso como asiento para vestirse, según las necesidades y preferencias de cada uno.
Un destino ejemplar de estos artículos son los pies de la cama, haciendo las veces de banco o butacón donde dejar la ropa de cama, los libros de lectura o la bandeja del desayuno. Los podrás encontrar de todos los estilos, materiales y acabados: fibras sintéticas y naturales, madera maciza, piel, plástico, lacados, con barniz, rústicos, etc.
Descanso de calidad
Además de proporcionarnos impagables momentos de descanso, la cama ofrece una amplia gama de opciones dado el hueco que ocupa. Tienes varias maneras de aprovecharlo: puedes instalar un canapé con tapa abatible, en el que todo el interior de la cama queda libre para almacenar lo que se precise, o unos cajones que aprovechen todo el ancho y la profundidad de la cama. Con cualquiera de estas dos ideas ganarás un precioso espacio para el almacenaje.
Las camas nido te permiten tener una escondida bajo la otra. Este lecho supletorio estará destinado a esas visitas especiales en las que quieres que tu invitado disfrute de un confort absoluto. ?Por qué dejar que nuestros seres queridos duerman en colchones de inferior calidad, plegables o incluso sofás? Con este mueble se multiplicará la capacidad de la habitación, además de permitirte tener siempre disponible una verdadera cama para que tus invitados descansen con la máxima comodidad posible.
Un armario organizado
La distribución en el armario es quizá la herramienta más útil para ganar unos cuantos metros a tu dormitorio. Nada despeja tanto de obstáculos visuales como un armario ordenado, para lo que necesitaremos un buen habitáculo con capacidad suficiente para albergar toda nuestra ropa.
El mobiliario a medida resulta una salida recurrente, ya que permite adaptar el mueble a tus necesidades concretas y destinar más espacio al lugar donde irán las camisas, o a crear módulos independientes para los accesorios; en definitiva, adaptar totalmente el armario a nuestras exigencias y características más personales.
Además, podrás instalar nuevos sistemas de clasificación, como perchas abatibles que te permitan colocar el perchero en lo más alto del armario, pantaloneros extraíbles que ocupen un reducido espacio vertical, o un simple zapatero en la parte baja en el que colocar y ordenar todo tu calzado.
Otras aplicaciones decorativas
Por supuesto, amueblar a medida ofrece muchas más posibilidades que el ahorro en el armario. Si tienes miedo de recargar una habitación con demasiados muebles, siempre puedes jugar con la percepción. Como normalmente fijamos la atención a la misma altura que nuestros ojos, los muebles auxiliares o módulos bajos, de un metro aproximado de tamaño, pueden ser una salida. Incluso puedes aprovechar una pared con ventana para ubicar justo debajo de ésta un socorrido mueble.
Como para todos los ambientes, la elección de los materiales es clave para ganar un poco más de eso que llamamos 'sensación de amplitud'. Colocar alguna puerta translúcida en el armario, panelar alguna puerta con un espejo de cuerpo entero, elegir maderas claras y muebles de apariencia ligera sin duda ayudarán a nuestro propósito.
Color y luminosidad
No debes olvidar inundar de luz tu hogar para que éste parezca más liviano y abierto. Cuando no dispones de grandes galerías de ventanales, es la pintura y el color de ésta lo que te puede ayudar a transmitir la luminosidad deseada. Los colores claros te ayudarán en tu propósito, como los crudos, pasteles o beige. No olvides crear pequeños contrastes con contados elementos más oscuros, como cortinas o estores: ayudarán a crear mayor profundidad visual.
El color del suelo, determinado en gran medida por el material, favorece el reparto de luz por todo el hogar. En él se reflejará muchas veces la luz que entra por las ventanas, y es por lo tanto determinante para favorecer la amplitud visual. El suelo de poliuretano o la tarima flotante son materiales en cuyos acabados encontramos colores claros que potencian nuestras expectativas, que son en resumen hacer que la vida en tu hogar sea lo más agradable posible.