En este sentido, el incremento del número de robos producidos en las viviendas españolas, es uno de los factores que ha alertado a los propietarios a salvaguardar su inmueble de la posible intrusión de ladrones. Las técnicas que utilizan para sustraer los bienes localizados en el interior de las casas que asaltan, son de lo más variado. Sin embargo, uno de los métodos más empleados para penetrar en los pisos es forzando la puerta de entrada.
Disuadir al ladrón
Una puerta reforzada en el exterior es sinónimo de protección. En ocasiones, es suficiente con que los ladrones vean una de estas puertas, para abortar su plan. Las opciones son amplias, ya que podemos escoger entre una gran gama de puertas pensadas para hacer de tu hogar un lugar más seguro. Si tuviéramos que diferenciar en función del coste, las puertas denominadas de seguridad, aparecerían como las más asequibles, mientras que en el otro extremo, tendríamos las acorazadas.
En un término medio, se situarían las blindadas. Se trata de puertas con interior de aglomerado u otros tipos de hojas, pero que incorporan una lámina de acero de grosor variable. La plancha de este material proporciona una extraordinaria solidez. Después, se recubre todo con tableros de madera. El aspecto exterior de la puerta es uno de los detalles en los que también se hace especial incidencia con objeto de los ladrones abandonen la idea.
Aunque la más solicitada, por económica, es la puerta de seguridad, la blindada gana terreno debido a sus prestaciones. Su instalación es bastante común en comercios y también en oficinas. Por otro lado, señalar que podemos optar por diferentes tipos de blindado en función de nuestras necesidades y nuestro bolsillo. Por ejemplo, una puerta semi blindada incorpora chapas de acero, pero no tiene el reforzamiento del marco, mientras que las denominadas 'bunker', sí lo incorporan.
Una cerradura fuerte
Las puertas blindadas constan de varios puntos de reforzamiento. Uno de los más importantes es la propia cerradura de anclaje de la puerta. El número de anclajes dependerá del grado de blindaje de la misma. Los cilindros que poseen estas cerraduras están pensados para impedir a los intrusos que los extraigan, ya que son capaces de aguantar mucha presión.
Para la apertura de las cerraduras se utilizan llaves hechas a medida o computadas de las que resulta complicado hacer copias una vez pasado el tiempo. Resulta fundamental que se extreme la precaución al portar estas llaves puesto que, en caso de pérdida, el cerrajero tardaría bastante tiempo en acceder a la vivienda. Además, al realizar la operación de apertura se producirían daños en la placa de acero.
El refuerzo del marco
El mejor bloqueo que existe en el mundo de las puertas blindadas es el anclaje cuádruple o bloqueo por los cuatro costados, que obliga a las barras de acero con las que cuenta esta puerta a moverse simultáneamente. Una de las barras va hacia la parte superior de la puerta y otra en la parte inferior. Las barras que van hacia la cerradura pueden variar en número, igual que las que se accionan de cara a las bisagras. No obstante, existen anclajes menos sofisticados y más económicos.
La zona por la que los ladrones suelen atacar las puertas blindadas son los perfiles de la misma. Es precisamente en este tema en el que insisten mucho los expertos en seguridad afirmando que, el reforzamiento de los marcos es esencial para que el uso de palancas no resulte efectivo. Los perfiles de hierro colocados en los marcos es un método que suele disuadir a los ladrones que intentan forzar la puerta y terminan por darse por vencidos al tardar tanto tiempo en violar la entrada.
Otro de los elementos que frecuentemente define a las puertas blindadas es la apertura de visión que permite su mirilla, llegando a abarcar una panorámica de 180 grados. Además, estas puertas suelen estar fabricadas con materiales de excelente calidad orientados al aislamiento acústico. Asimismo, pueden ofrecer la función añadida de aislar las temperaturas extremas y de estar preparadas ante el fuego, permaneciendo inalterables.