Que duda cabe que tanto el punto, el ganchillo o el macramé se han vuelto a poner de moda y ahora que comienza el frío apetece llenar nuestras casas de prendas cálidas y confortables. La vuelta a lo artesanal, al “hazlo tú mismo” se ha convertido en una tendencia con miles de seguidores, ya no hay rincón del planeta en el que no te encuentres a alguien tricotando o como se dice actualmente, “knitting”. Buscando inspiración sobre todas estos tipos de tejidos he encontrado cosas muy interesantes y he aprendido las diferencias entre unos y otros, que hasta ahora no tenía muy claras.
Vamos a ver las distintas clases de punto y técnicas orientadas al mundo de la decoración y algunos DIY de trabajos realizados.
Punto
El punto o tricot propiamente dicho es el tejido que se elabora simultáneamente con dos agujas, los puntos se unen estrechamente de una aguja a otra proporcionando así una estructura más resistente. El tejido se realiza con hilos tanto de fibras naturales como artificiales, siendo el más utilizado la lana. Según el tamaño de las agujas conseguirás un punto más pequeño y homogéneo o más grueso, ideal para mantas y fundas de cojines con aspecto más rústico.
Croché
El croché o ganchillo, es una técnica en la que se teje con ayuda de una sola aguja curvada en un extremo (gancho), y que puede ser de diferentes tamaños y materiales -madera, metal o plástico- según el tipo de hilo con que se vaya a realizar la labor, normalmente lana, perlé o algodón. Su acabado es muy versátil dependiendo del hilo que se utilice, los más finos (algodón y perlé) se usan para labores más delicadas como colchas, paños o terminaciones de manteles y sábanas, y los más gruesos (lana) para realización de mantas, fundas para pufs, alfombras, etc.
DIY: crafts.tutsplus
Trapillo
El trapillo es la variante “moderna” y ecológica” del ganchillo en la que se utiliza tela reciclada para la elaboración del producto, su acabado con diferentes tipos de nudos y la gran variedad de estampados y colores que existen la hacen una técnica muy atractiva. Se realiza con ganchos y agujas de tamaño XXL, bien de plástico o de madera de bambú y la tela que se utiliza suele ser de algodón y licra de diferentes grosores. Con el trapillo se puede hacer toda clase de complementos al igual que con el ganchillo o el punto, con la particularidad que por el tipo de tejido el acabado será mucho más actual.
Macramé
Es una técnica en la que el tejido se va formando a base de nudos y que para llevarla a cabo solo se utilizan las manos y la ayuda de una superficie donde poder apoyarnos, normalmente un gancho o un palo de madera. El hilo que se usa para tejer el macramé suele ser de fibras naturales, algodón, seda, yute, lino, etc. El macramé permite elaborar cantidad de piezas como maceteros colgantes, tapices que darán un toque bohemio a las paredes, hamacas para colocar tanto en interiores como en exteriores, y hasta máxilamparas que colgadas del techo son perfectas para darle un toque informal a cualquier espacio.
Imágenes: Pinterest
¿Qué clase de tejido de punto os gusta trabajar más?
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