Después de la buena acogida que tuvo el tutorial del cojín de lana de la semana pasada, hoy os traigo uno que hice hace tiempo pero que todavía no os había subido.
Su procedimiento es diferente, pero también igual de fácil que el anterior.
En casi todas las fotografías de decoración nórdica, aparece el símbolo de la cruz, así que como no es de extrañar, lo quería. Busqué y rebusqué para ver si encontraba un cojín que se me ajustara, pero a decir verdad, todos me parecían un poco caros, así que como siempre, decidí hacerlo yo.
Así que aquí os dejo la explicación y como os he dicho antes, es muy muy fácil de hacer, y hasta los más peques os podrán ayudar.
Lo que necesitamos es:
- Una funda de cojín
- Celo o cinta de carrocero
- Lapiz y goma
- Pincel y pintura
- Un folio blanco
- Tijeras
- Un trozo de cartón.
Lo primero que hay que hacer es cortar por la mitad el folio blanco, para eso lo doblaremos por la mitad verticalmente y con la ayuda de las tijeras lo cortaremos.
Después colocaremos los trozos de papel que tenemos encima de nuestra funda de cojín formando una cruz.
Ahora con la ayuda del celo, vamos resiguiendo poco a poco nuestros papeles. Yo os lo he hecho de dos formas para que veáis que sino tenéis celo lo podéis reseguir con lápiz
Cuando lo tengamos todo reseguido, (como véis podéis ver que solo con el lápiz también podéis hacerlo, pero a la hora de pintar es un poquito más costoso) retiramos el papel.
Colocamos el cartón dentro de nuestra funda, para que a la hora de pintar no traspase y con la ayuda del pincel y la pintura, empezamos a pintar poco a poco. Como véis, en la última línea, he usado cinta de carrocero para que veáis que también sirve.
Una vez seco retiramos la cinta. Si os queda la linea un poco torcida o mal hecha, con la ayuda de un pincel y pintura negra lo podéis retocar. En la foto podéis ver como a mi en la unión se me salió un poco de blanco pero después lo arreglé y como si no hubiera pasado nada!
Y ya tenemos nuestra funda de cojín lista para poder colocar en cualquier rincón de nuestra casa.
Como véis es muy fácil personalizar un cojín, así que si tenéis alguno en casa que no os guste su aspecto, lo podéis teñir de cualquier color y luego añadirle vosotros mismos el estampado.
¿Soléis teñir y personalizar complementos en casa?
¡Sígueme y no te pierdas nada!
FacebookTwitterGoogle +Pinterest
Comparte este post en:
Fuente: este post proviene de Alquimia, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
