De verdad que pocos DIY de los que encuentro en blogs (incluyo PetiteCandela) me han parecido tan bonitos y tan sencillos de hacer, como el del post de hoy. Una taza con ese encanto de lo hecho a mano, lowcost y bonita de verdad.
No sé vosotras, pero yo soy de esas humanas a las que le encantan las tazas (quien dice tazas, dice menaje en general... Ya sabeís... platos, cuencos, bols -preciosos unos de Primark que compré hace nada- bandejas... Y todo esto sin tener ni idea de cocinar... Ejem). No tengo una colección, ni un lugar donde mostrarlas, pero cada vez que veo una bonita, tengo tentaciones locas de llevármela a casa. Y es que luego, te sientas a trabajar (que yo lo hago en casa), organizas un poco la mesa, colocas papeles, enciendes el ordenador, empiezan a entrar correos, correos, correos... En fin. Una mañana normal! Entonces, ves tu taza en la esquina de la mesa que te espera para ese rato que llegará a media mañana de tomarte un cafelito con leche cotilleando los blogs que te gustan (ahora ya casi no tengo tiempo para darme ese gustazo, pero la taza no la suelto ni de broma).
I love taza... Y vosotras??
Estoy segura de que si sois de café a media mañana en taza inspiradora,
este DIY más de una lo hace el finde.
Además, tiene un montón de posibilidades, porque quien dice en tazas, dice en platos, vasos...
Ufff... Qué descubrimiento tan peligroso.
Buen martes (compartid!)
Coralia.
Vía: PoppyTalk
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Fuente: este post proviene de Petite Candela, donde puedes consultar el contenido original.
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