¡Buenos días! Hoy en el blog os quería enseñar los pequeños avances que tiene mi balcón. La verdad es que esta es una parte de la casa que todavía no le había echado mano y quería poder decorarla para darle un mayor uso, aunque me es bastante difícil porque como sabréis tengo dos conejitas llamadas amorosamente aquí en casa "hijas del demonio" o dícese también Cristobalina y Diana, las quiero mucho, pero no puedo tener planta o flores porque se las comen y la valla al ser de junco también lo están destrozando...ya sabéis conejos, por lo que me resulta muy difícil tener el balcón bonito, pero aun así quería intentarlo y aunque sean poco a poco y con cositas básicas parece que ya va siendo otra cosa.
Mi balcón es largo y estrecho, de momento solo tengo un uno de los lados, pero según vaya decorandolo os lo iré enseñando como siempre. Uno de mis principales objectivos era poner una mesa (todavía por comprar) para poder desayunar en verano o hacer alguna cenita Cris y yo.
Así que en lugar de colocar una mesa y las dos sillitas se me ocurrió colocar un sofá de palets, ya que si los cortaba por la mitad me encajaban perfectos, de esta manera cuando se use la mesa nos hace la función de silla, y cuando no, se plegará y tendremos un sofá para poder relajarnos.
La verdad es que Rocco esta encantado se pasa el día subido mirando por la valla cual maruja de pueblo. Tengo que buscar unos cojines para el asiento para que sea mas mollosito.
Puse a modo decorativo esta guirnalda, y me gustó mucho el efecto que hace en conjunto con la valla de juncos y los cojines, tendré que añadir alguna más, porque no tenemos iluminación exterior y si queremos cenar o estar fuera de noche no hay apenas luz.
Finalmente he añadido algunos detalles con flores y plantas, porque son imprescindibles para que un balcón tenga vida y son los elementos más característicos de estos espacios, se que es un crimen, pero las tengo que tener de plástico por las conejas, y porque sinceramente, cualquier planta que entre por la puerta de casa esta sentenciada a la muerte.
La rueda me la trajo Cris y la vi perfecta para crear en el balcón un rinconcito con los faroles, la pinté con chalk paint para darle un efecto envejecido al igual que las macetas de barro.
Me falta mucho, mucho trabajo, pero se van viendo los resultados y me encanta sentarme a mitad tarde un ratito con Rocco y relajarnos, ahora que no hace ese calor agobiante típico del verano valenciano.
Espero que os haya gustado el cambio y nos vemos en el próximo post.
Bss