En lo que ambas estuvimos de acuerdo fue en el color. Habíamos comprado un nuevo amarillo que estábamos deseando probar, y qué mejor sitio que éste para aplicarlo y ver los resultados.
Adquirimos los pomos (nos costó muchísimo encontrar lo que buscábamos, dicho sea de paso) en un tienda on line, y nos gustaron más, si cabe, al verlos al natural. En cerámica y con un suave color avellana, contrastaban a la perfección con el amarillo elegido...
...y combinaban con el papel elegido para forrar el interior de los cajones.
El resultado ha quedado llamativo y original y nos encanta como mueble para la televisión, como aparador para un comedor o incluso para un rincón de un dormitorio, dando uso a sus cajones para ropa.
Hemos quedado encantadas con el resultado, a pesar del laborioso trabajo, como ya supondréis, de lija, pintura, barnizado y forrado de cajones. ¡Ha merecido la pena, ¿no creéis?! Podéis verlo con detalle en nuestra tienda Rastro con encanto.